UCAM Murcia-Covirán Granada | Crónica y resultado

El Covirán Granada se va al parón de la Liga Endesa con una nueva derrota y malas sensaciones

Malik Dime logró sus mejores números desde que está en Granada.

Malik Dime logró sus mejores números desde que está en Granada. / ACB Photo (Murcia)

El Covirán Granada cosechó su cuarta derrota seguida tras caer de manera clara y contundente ante el UCAM Murcia por 13 puntos (91-78), que dominó el partido a placer y siempre fue por delante en el marcador. Los de Pablo Pin se van al parón por la Copa del Rey y las Ventanas FIBA con malas sensaciones y obligados a reforzar su plantilla pues con una rotación tan corta no se puede competir en la Liga Endesa.

El técnico les pidió a sus jugadores un paso adelante tras la marcha de Joe Thomasson pero no todos los dieron en tierras murcianas. El ejemplo más claro fuel, una vez más, David Kramer, que salió en el quinteto titular pero sigue sin ser ese hombre decisivo para su equipo. Los rojinegros aguantaron poco la agresividad defensiva de los de Sito Alonso que, además, gozaron de un gran acierto en el tiro sobre todo en la pintura.

Escaso poder anotador

El UCAM aprovechó la caraja inicial de los de Pin y, poco a poco, fue adquiriendo ventajas. Y es que los visitantes, que estuvieron apoyados por un reducido número de seguidores, anotaron tan sólo cuatro puntos en los cinco primero minutos. Un bagaje muy pobre. Eso hizo que fueran los murcianos los que dominaran en el marcador durante toda la primera mitad.

Desde el banquillo se trató de buscar soluciones dando entrada a Christian Díaz y Pere Tomàs pero únicamente Kwan Cheatham dio cierto nivel en cancha delantera. Marko Todorovic hizo lo que quiso en la zona y tras dos canastas similares, el técnico del Covirán se vio obligado a parar el partido con 17-6 en el electrónico. Un 78% en tiros de campo por un 27% explicaba el resultado. Y, de esos 17 puntos, 12 fueron bajo el aro, donde ni Felicio ni Malik Dime lograron imponer su físico.

Entró Jonathan Rousselle y algo mejoraron los granadinos. Pero es que en 8 minutos y 19 segundos tan sólo había anotado seis puntos. Reaccionaron en la recta final y con seis puntos en los dos últimos minutos, se fueron al primer receso doce abajo (24-12), aunque llegó a perder por 14. Y eso pese a dominar el rebote. El 8 de 9 en tiros de dos de los locales, casi todas bajo el aro, fue demasiado regalo para un conjunto que el jueves disputará la Copa del Rey.

Jonatham Rousselle trata de ganar línea de fondo ante Rodions Kurucs. Jonatham Rousselle trata de ganar línea de fondo ante Rodions Kurucs.

Jonatham Rousselle trata de ganar línea de fondo ante Rodions Kurucs. / ACB Photo (Murcia)

El segundo cuarto fue algo mejor. No era tampoco excesivamente complicado. Tras un intercambio de canastas, un triple de Rousselle abrió un parcial para los rojinegros que llegó a ser de 0-9 gracias a seis tiros libres convertidos de manera consecutiva. Del 29-15 se pasó al 29-24, lo que provocó que Alonso parara el choque. El Covirán trató de cerrar su pintura con una defensa zonal pero Todorovic y el despertar anotador de Ennis, dio paso a un parcial 9-1 devolviendo la docena de puntos a favor de locales.

Los de Pin se ahogaron ante la intensidad defensiva de su rival

Tras Todorovic apareció Radovic y todo volvió a su sitio para desgracia de los Pin. La intensidad defensiva murciana, sobre todo en la primera línea, ahogó la creación del Covirán. De ahí al descanso, y tras una absurda falta de Dime que le dio dos tiros libres a su contrincante, el UCAM se fue a los vestuarios con la máxima que había tenido (14) y con la sensación de estar un par de escalones por encima de su rival.

Con un mate de Ennis arrancó la segunda parte, pero se echaron en falta los 14 puntos que promediaba Joe Thomasson. Nadie asumió ese papel pues Cheatham, el principal foco anotador, estuvo muy vigilado y el Covirán, poco a poco, vio cómo Murcia se fue distanciando para desesperación de Pin, al que le pitaron una técnica por protestar. Ennis y Howard Sant-Roos, con un triple, lanzaron a su equipo 22 arriba tras un parcial de 12-4 que obligó a Pin a pedir tiempo muerto (58-36).

Sin soluciones

El técnico no dio con la tecla. Puso en pista a su quinteto titular habitual con Rousselle por Thomasson que era el habitual pero ya no está, tratando de reducir diferencias. Al menos logró que sus jugadores no se fueran del partido y tras un 0-6, pero Ennis, con dos triples, rompió con las ilusiones de los granadinos de reducir aún más la desventaja. Todorovic prácticamente sentenció el choque con un triple que disparó la renta de los murcianos a 24 puntos (69-45) y con Kramer en el banquillo. Era el día para el paso adelante, pero sigue sin darlo. Pin volvió a parar el choque pero los de Sito Alonso estaban lanzados, llegando al término del tercer periodo con un contundente 74-50 que dejó finiquitada la cita tras endosarle a su rival 29 puntos.

Los últimos diez minutos fueron un puro trámite. No es la primera vez que sucede. Pin le solicitó a sus pupilos que no bajaran los brazos, cosa complicada, pero lo hicieron gracias también a la relajación de los locales. De nuevo, les sirvieron a Kramer para maquillar sus números. Lo más destacado fue que Radovic se convirtió en el máximo anotador histórico del cuadro murciano porque la renta siguió rondando la veintena hasta que quedó en 13 puntos, dejando claro que el Covirán Granada necesita refuerzos ya. Lo único bueno es que se sigue fuera del descenso tras la derrotas de Breogán y Obradoiro.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios