El ex juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha mantenido este martes que la infanta Cristina debería haber comparecido ante el juez instructor del caso Nóos, José Castro, "desde el inicio" y ha subrayado que "el ejemplo de las instituciones, y especialmente de la Jefatura de Estado, hacia los ciudadanos no debe ser el que dé a pensar que hay cosas que ocultar" porque "la ley es igual para todos".

"Me parece que la decisión de la Infanta para (renunciar a) ese recurso está muy bien, es probablemente lo que tenía que haber hecho desde el principio", ha dicho Garzón en una entrevista en Canal Sur.

En cualquier caso, el juez ha recordado que "imputar no significa más que proteger los derechos" y ha lamentado que en España se imponga un "estigma" a los imputados. "En España si se imputa a una persona, algunas con más trascendencia mediática que otras, ya tienes el estigma y te destruyen en los medios de comunicación y eso no está bien", ha subrayado el magistrado.

"Una garantía jamás puede ser un estigma para nadie", ha insistido Garzón, que ha puntualizado que "otra cosa" es la responsabilidad de los cargos públicos imputados ya que, según ha explicado, los ciudadanos han depositado en él una confianza y cuando ésta se pone en duda, es normal "no obligar a los ciudadanos a que comulguen con la presunción de inocencia, que es un derecho personal".

El ex magistrado considera que España sufre una "esclerosis múltiple de los derechos humanos" y que desde fuera hay una percepción "muy negativa" del país y, en alusión a algunas de las leyes más recientes del Gobierno central, ha mantenido que "criminalizar la protesta es una barbaridad" y la ley del aborto, "un atraso que no se entiende".  "Incluso los planteamientos sobre el terrorismo empiezan a sorprender", ha dicho Garzón atribuyendo esta situación a la "falta de diálogo entre partidos y al alejamiento entre éstos y ciudadanos", según ha explicado.

Preguntado por si considera que ETA dejará finalmente las armas ha dicho que cree que es algo que sí puede suceder y ha abogado por "dar pasos" para que "no aparezcan tics autoritarios" por parte de la banda terrorista ni otros "intransigentes" por el lado del Gobierno de España. "Es el momento de dar el paso siempre con la protección de los derechos de las víctimas pero con una mirada claramente positiva hacia la finalización por el diálogo y por la normalización política porque cualquier opción política es válida si la violencia está fuera", ha añadido.

Con respecto a la Ley de Seguridad Ciudadana ha insistido en que es "una regresión" y ha señalado que "a base de palos y sanciones por manifestarse para reclamar derechos no se consigue un mejor país sino que se asusta". "Ese susto en democracia no debe producirse", ha añadido.

Por último, el magistrado ha señalado que no aspira a ostentar una representación política parlamentaria pero ha indicado que sí prevé "emitir opiniones", como está haciendo en los últimos tiempos, para que "los ciudadanos seamos conscientes de lo que nos jugamos".