La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha acusado hoy al PP de actuar como "pájaro de mal agüero, al acecho del botín electoral", por no apoyar al Ejecutivo actuando como un partido con "sentido de Estado" y ha afirmado que "su ceguera electoral les tiene asilvestrados".

Durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso, la vicepresidenta ha respondido así a la portavoz del grupo parlamentario popular, Soraya Sáenz de Santamaría, quien ha acusado al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero de haberse quedado "sin ideas y sin ideología".

Fernández de la Vega ha destacado que un Gobierno que es capaz de tomar decisiones duras y difíciles sí crea confianza, pero no lo hace una oposición que "sólo es capaz de montar algaradas y de decir 'no' a todo para obtener réditos electorales".

Todos los gobiernos europeos, según Fernández de la Vega, están adoptando decisiones difíciles y todos los partidos de la oposición están apoyando a sus gobiernos, "salvo el PP, que ha optado por entrar en ese juego de carreras electorales".

Ha añadido, en este sentido, que al PP las dificultades que afectan a España y a Europa "le importan poco, por no decir nada", porque este partido "no ha pasado el test europeo".

La vicepresidenta ha lamentado que mientras el Gobierno toma decisiones difíciles en Bruselas y Madrid, el líder de la oposición, Mariano Rajoy, "come caracoles y dice que todo va muy mal", y el PP "está de fiesta en Valencia, aunque no sé muy bien qué celebran".

"Su ceguera electoral les tiene asilvestrados", ha lamentado Fernández de la Vega, antes de pedir a los populares que "se apliquen el cuento" de la contención en Madrid y Valencia, donde "son expertos en números rojos" y hay que aguantar el "descaro" de sus presidentes, como en el caso de Esperanza Aguirre, que hace unos días afirmó que era "pobre de pedir".

Para la vicepresidenta, el PP actúa como "la amenaza fantasma", ya que "no se sabe dónde van a estar; eso sí, nunca están donde los partidos que tienen sentido de Estado deben estar, porque han optado por quedarse fuera, estar al margen, como pájaros de mal agüero, al acecho del botín electoral. Qué lastima".

Sáenz de Santamaría ha subrayado que el decreto-ley de recortes aprobado por el Gobierno es "una declaración de principios de Zapatero" en la que se ve que "los ha ido perdiendo todos".

Bajo su punto de vista, "es el decreto-ley del desengaño, el de un presidente que ha fallado a todo el mundo", desde los pensionistas, a quienes prometió no recortar derechos sociales "y ahora los deroga por decreto", hasta los trabajadores, porque "empezó diciendo que bajar impuestos era de izquierdas y ahora se los sube a todo el mundo".

"Este decreto-ley es la declaración de principios del PSOE de Zapatero, y el principio de su final", ha añadido la portavoz popular, quien ha acusado al Gobierno de no tener criterio porque para ello "hace falta primero un proyecto político, después principios y luego liderazgo".

No están en condiciones, ha añadido la portavoz, de dar lecciones de nada, puesto que el Gobierno no puede presumir de coherencia si "suben o no los impuestos según el ministro al que se le pregunte", ni de criterio, como se ha visto con la deuda a los ayuntamientos, ni de responsabilidad, puesto que al principio "negó la crisis", luego "le dio por gastar hasta hundirnos" y ahora "prefiere recortar las pensiones a quitarle la cartera a algún ministro".

A este respecto, ha señalado que el Ejecutivo "se ha acostumbrado tanto a los bandazos que les llama con descaro 'corrección de errores'". "Gobiernan sin pensar; si pensaran de verdad en España hace tiempo que no estarían en el Gobierno", ha concluido.