El papa Francisco recibió ayer en audiencia privada a Leonardo Di Caprio, que se encuentra de vacaciones en Roma. Fue el actor quien pidió conocer al Pontífice, al que considera una autoridad en materia de Medio Ambiente, un tema con el que también se encuentra muy concienciado el americano. En su visita, Di Caprio entregó al Papa un libro del pintor holandés Hieronymus Bosch.

Su visita al Vaticano coincidió con la publicación de unas fotografías en Twitter que confirman el affaire del actor con Rihanna, una imagen que ha corrido como la pólvora en las redes sociales y en la que ambos aparecen besándose en una discoteca parisina. El entorno del actor quiso parar la publicación de estas imágenes, aunque finalmente han visto la luz en las redes sociales dando veracidad a una relación que Di Caprio siempre había negado. Las fotos coinciden con la presentación del último trabajo de la de Barbados.