Los árboles que se plantaron en la glorieta donde se cruzan la calle Torre de la Pólvora con la avenida de Carlos V, más conocida como Carretera de La Zubia, han desaparecido. Eran chopos que no terminaron de adaptarse al terreno, una cosa parecida a lo que ocurrió con los de Carlos V, que también van a ser sustituidos.

El Ayuntamiento, y así lo reconoció ayer el concejal de Mantenimiento, Vicente Aguilera, no ha tenido mucha suerte o mucho acierto a la hora de elegir las especies arbóreas que se plantaron en la zona. "Han ido desapareciendo casi desde el principio. No se han consolidado porque no eran los adecuados", admitió ayer sin ambages.

Las labores de sustitución de los chopos por otros 171 árboles "más resistentes" se va a acometer entre los meses de enero y febrero, considerados los más propicios para ello. Vicente Aguilera insistió en que no sólo se trata de repoblar la avenida. "Es algo que se enmarca en una actuación de más envergadura, que incluye plantar no ya cientos, sino miles de arbustos, instalar el riego por goteo centralizado y ubicar seis aparatos de gimnasia para mayores, algo que ya existe en el parque Federico García Lorca y que, según el edil, ha tenido "gran aceptación".

La actuación acometida por el área de Mantenimiento tiene un presupuesto de 233.000 euros. Además de retirar las especies estropeadas por otras más adecuadas para el entorno -o eso se espera, al menos- como el ginkgo biloba. Conocido también como el árbol de los cuarenta escudos, llega a alcanzar los 35 metros y es de copa estrecha, lo que le da una forma algo piramidal. Sus hojas, de color verde, miden entre 5 y 15 centímetros.

Asimismo, se plantarán 2.046 arbustos y 2.560 plantas tapizantes y se instalará un sistema de riego por goteo centralizado en un pozo ubicado en el parque cercano, que también abastecerá a la fuente frente al Centro Cívico del Zaidín.