Condenan a prisión a tres alumnos de Derecho por falsificar diplomas

Falsificar un documento es algo muy serio. Aunque se trate de un simple certificado de asistencia a un curso para engordar los méritos académicos, es un delito con todas las letras. Tres estudiantes de la Universidad de Granada (UGR), un chico y dos chicas, lo acaban de comprobar en la práctica. El juez de Penal 1 de Granada les ha impuesto un año y nueve meses de prisión al primero, y seis meses de cárcel a las segundas por falsificar unos diplomas.

En su sentencia, dictada con la conformidad de las partes, el magistrado, Manuel Píñar, considera probado que los acusados, A.R., E.P. y R.C. , aprovechando que uno de ellos ejercía funciones en un sindicato de estudiantes y que, por tanto, tenía acceso a ciertas dependencias de la Facultad de Derecho, en diciembre de 2013 "idearon la expedición de varios diplomas".

Los documentos fueron confeccionados por A.R., "que imitó las firmas de los profesores y directores de cursos" y, a cambio de "una cantidad de dinero" que percibió, "trataban de acreditar" que las otras dos estudiantes "habían participado en varios cursos de formación", pese a ser "los tres sabedores de no haberlos realizado".

Los acusados actuaron, según recoge la resolución, a la que ha tenido acceso este diario, "con la finalidad de obtener méritos académicos, de tal modo que llegaron, incluso, a presentarlos en el Registro de la Facultad para que se les fueran reconocidos de forma oficial."

La causa, en la que había un cuarto alumno encausado que finalmente ha sido absuelto, aterrizó en los juzgados en virtud de una denuncia y ha ejercido la acusación particular la Universidad de Granada.

Junto a la pena de prisión, el juez impone a los tres estudiantes el pago de una multa. Para el primero, fija la sanción en 1.080 euros (nueve meses a una cuota de 4 euros), mientras que para las dos restantes lo hace en 720 euros (seis meses a una cuota de 4 euros).

Ninguno de los tres acusados tiene antecedentes penales y el fallo recoge expresamente que la ejecución de la pena de prisión de seis meses impuesta a las dos chicas "se les suspende por dos años si en 60 días pagan cada una la multa de 1.440 euros". Sobre la ejecución de la pena del primero, la resolución no especifica nada, pero las fuentes jurídicas consultadas recordaron que al ser la pena inferior a 2 años podría solicitar igualmente la suspensión para evitar ir a la cárcel.

El ilícito por el que se les condena a los tres es un delito de falsedad en documento oficial, pero la pena es superior para el chico al considerarlo "continuado" en su caso.

El juez recuerda que "la conformidad de los acusados con el relato del escrito de acusación, modificado, determina que se acepte como cierto en su integridad y se les estime autores de los delitos indicados". Por ello, el magistrado dicta sentencia "sin más, imponiendo las penas y responsabilidades aceptadas".

El delito de falsedad en documento oficial está recogido en el artículo 392 del Código Penal, que castiga con penas de prisión de seis meses a tres años a quien cometa en un documento público, oficial o mercantil, alguna falsedad, como puede ser simular un documento, en todo o en parte, de manera que induzca a error sobre su autenticidad.