El alcalde de Granada, Luis Salvador, ha debido de notar estos días más que nunca su soledad en el cargo. El equipo de gobierno de Cs y PP que durante dos años ha presumido de mantenerse unido y cohesionado ya no lo está y además pretende hacer pública y escenificar la distancia.

Los miembros del grupo municipal del PP tienen la consigna estos días de evitar los actos conjuntos con el alcalde y aparecer en fotos con Salvador. El plan es mantener su propia agenda, con los actos correspondientes a las responsabilidades de gobierno que les conciernen, pero evitar mezclarse en los asuntos en los que interviene directamente el alcalde.

En el pregón del Corpus ya se hizo notar la distancia, y en los actos posteriores sus caminos se separaron. Es una forma más que tienen en el Partido Popular de hacer notar a Salvador que con sus escasos escaños en el Ayuntamiento y sin su apoyo no puede seguir adelante durante mucho tiempo más.

Pocas horas más tarde, el primer edil, de Ciudadanos, accedió a reunirse con el presidente provincial del PP, Francisco Rodríguez, con el que el mismo Salvador anunció en redes que trataba de buscar "distintos escenarios y posibilidades en los temas comunes". 

El PP, por su parte, asegura no moverse de su "hoja de ruta", que es recuperar la Alcaldía con Salvador como otro socio más de gobierno, pero con un alcalde popular. En esa línea se sitúa la nueva consigna del grupo municipal del PP.