España volvió a recordar a las víctimas del terrorismo el viernes 22 de octubre en un acto celebrado en Sevilla y que contó con la presencia del ministro del interior, Fernando Grande-Marlaska. Se entregaron seis grandes cruces y catorce encomiendas de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo. En este homenaje, fue condecorado el sargento granadino David Fernández Ureña, que falleció en octubre de 2013 al explosionar un artefacto cuando estaba de servicio en Afganistán.

Fernández Ureña, que nació en Bilbao pero vivió casi toda su vida en Granada, donde fue enterrado, murió a los 35 año. Formaba parte de la Unidad de Ingenieros de la ASPFOR XXXII. La explosión que acabó con su vida se produjo cuando su equipo de reconocimiento examinaba un tramo de la ruta OPAL donde había sido localizado el citado artefacto. Era especialista en NBQ -defensa nuclear, biológica y química-, operador de desactivación de artefactos explosivos y contaba con el curso básico de paracaidismo.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, elogió el papel de las víctimas del terrorismo como "referencia ética" de la democracia española. "Fuisteis, sois todavía hoy y seréis siempre el símbolo de la defensa de la paz, la libertad y el Estado de derecho frente a la sinrazón y la barbarie", señaló.

Grande Marlaska pronunció estas palabras durante la entrega de seis grandes cruces y catorce encomiendas de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo en un acto celebrado en la capital sevillana, al que también asistieron el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, entre otras autoridades.

"Entregaros estas grandes cruces y encomiendas es un acto punzante pero de justicia, porque nada hay más justo que reconocer vuestro ascendiente ético en el proceso de conformación de los valores que rigen la convivencia de nuestra sociedad", añadió el ministro.

Grande-Marlaska defendió el testimonio de las víctimas como elemento clave para construir la memoria colectiva sobre el terrorismo. "El relato debe ser el vuestro, el de vuestro sufrimiento y también el de vuestro triunfo final. Esa es la única narración que fortalece el discurso democrático, la única en la que podemos reconocernos y encontrarnos para convivir", manifestó.

Reunión de trabajo en la delegación del Gobierno

Antes de la entrega de condecoraciones, el ministro del Interior mantuvo una reunión de trabajo en la Delegación del Gobierno con el delegado, Pedro Fernández, y los subdelegados y subdelegadas de las ocho provincias andaluzas, para analizar cuestiones de seguridad y los proyectos del Ministerio del Interior en la comunidad autónoma.

El ministro destacó la positiva evolución de la tasa de criminalidad en Andalucía, que se sitúa en el 35,6 (infracciones penales por cada mil habitantes), 4,7 puntos inferior a la registrada en 2019 y casi cuatro puntos por debajo de la media nacional.

En la reunión se realizó asimismo un positivo balance de las actuaciones llevadas a cabo en el marco del Plan Especial de Seguridad para el Campo de Gibraltar, así como se han abordado las medidas para seguir incrementando la eficacia policial en la lucha contra el narcotráfico.