Son las 3:00 horas del 1 de noviembre. Una famosa discoteca de Granada celebra su fiesta de Halloween cuando, en mitad de la pista de baile, comienza el caos. Un joven tiene el rostro lleno de sangre y necesita atención médica. ¿Los motivos? Otro joven le ha estrellado un vaso de cristal en la cara, hechos por los que el agresor ha sido detenido por la Policía Nacional.

Un pisotón y una queja por el mismo fueron los motivos que propiciaron este altercado por el que un joven de 20 años ha sido arrestado y ya ha pasado a disposición judicial, por haber provocado lesiones faciales y oculares “de cierta consideración” a otro.

Tal y como han informado desde la Policía Nacional, "la víctima, en compañía de otros dos amigos, se encontraba en la zona de la pista de baile del local donde se habían desplazado para consumir una copa, momento en el cual recibió un pisotón por parte de otro cliente del establecimiento".

La reacción inmediata por parte de los tres amigos fue reprender este comportamiento, siendo la respuesta del reprendido la de supuestamente "estrellar, sin mediar palabra, el vaso de fino cristal en el que portaba la bebida que consumía" contra la cara de la víctima. Como consecuencia de ello, la víctima sufrió profundos cortes en la cara provocados por los cristales fracturados.

La Policía Nacional atendió el requerimiento de los vigilantes de seguridad del mencionado lugar de ocio, donde acompañaron a los agentes hasta el varón español de 21 años que presentaba varios cortes en la cara, motivo por el cual solicitaron la presencia de una ambulancia medicalizada.

El personal sanitario, tras una primera valoración médica, concluyó que el paciente necesitaba ser trasladado a un centro hospitalario para poder ser atendido de los cortes faciales que presentaba "debido a la gravedad de los mismos y ante la posibilidad de que el globo ocular pudiese haber sido afectado igualmente".