A Emasagra no le cuadran las cuentas y lo peor de todo, es que le suben. La Comisión de Sequía Ordinaria celebrada ayer sirvió para poner sobre las mesa de los integrantes un dossier económico y del estado de la situación actual de los embalses y pozos que abastecen a la ciudad. Conclusión: Emasagra ha tenido un sobrecoste en gastos que asciende al 50% en relación con el año pasado. Un hecho que ineludiblemente encarecerá el recibo de los granadinos para 2009. Y es que la falta de agua pasa factura a todos, incluida, la Empresa Municipal de Abastecimiento y Saneamiento de Granada que ha visto cómo en el último año sus gastos se han disparado por tres razones: la subida del 45% por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir por el uso de los embalses que ha supuesto un encarecimiento de un millón de euros; el encarecimiento en la factura eléctrica -especialmente durante las horas nocturnas- que es cuando Emasagra utiliza para el bombeo de agua de los pozos y, por último, el incremento en la subida de los tipos de interés ha hecho que la Empresa tenga un sobrecoste que dobla al del año anterior.

La empresa municipal explica que el efecto sequía (la han calificado como una de las más duras de los últimos setenta años) ha motivado que Emasagra haya tenido que recurrir a todas las medidas necesarias para abastecer a la comunidad sin recurrir a las restricciones aunque haya sido en perjuicio de su economía. "Hay que tener en cuenta que actualmente el sesenta por ciento del agua para consumo se está bombeando de los pozos de la Vega y sólo el cuarenta por ciento procede de los embalses", matizan fuentes municipales.

Con esta situación, la comisión ha convocado una nueva reunión para el próximo 24 de julio, fecha en la que expondrán las medidas a tomar para intentar paliar los gastos, a pesar, de que Emasagra ya ha anunciado que para enero de 2009 se prevé una subida "significativa" de la factura.

En cualquier caso, los miembros de la comisión (formada por los grupos municipales PP-PSOE-IU) ya tiene en mente algunas de las medidas que se podrían tomar para que la factura del precio del agua no se resienta de manera excesiva. Una de las propuestas es la adaptación de las tasas según el consumo responsable o irresponsable que se haga de la misma. La batería de proposiciones quedará cerrada para aprobarlas en sesión plenaria. A pesar de todo, la empresa municipal de abastecimiento y saneamiento lanza un mensaje de tranquilidad a los usuarios tanto de la ciudad como de los trece pueblos del área metropolitana a los que presta servicio y garantiza el suministro domiciliario gracias a la gestión de las reservas hídricas superficiales y al uso de los diez pozos subterráneos que tiene en funcionamiento.