Granada

Granada-Almería, viaje a la estación 'fantasma'

  • Cada día, viajeros de la provincia limítrofe llegan a la estación de Andaluces a través de la vía de Moreda

  • Granada Hoy realiza este trayecto en ferrocarril y autobús para relatar la experiencia

Aunque no lo parezca cada tarde un tren descarga y recoge viajeros en la ciudad de Granada. Lo hace en la estación de Andaluces donde, a pesar del aspecto fantasmagórico que presenta este entorno inmerso en obras para la llegada del AVE, todavía se puede ver a pasajeros con maletas en la zona. Se trata del tren que conecta la capital con Almería, un medio de transporte que cada día viaja entre ambas ciudades plantando cara al aislamiento ferroviario que afecta a Granada con pasajeros que se muestran fieles a una infraestructura que ofrece comodidad y belleza a través de sus ventanales. Granada Hoy se ha subido a este tren para comprobarlo. El resultado de este viaje que se hizo en la ida en bus y en la vuelta en tren...en el siguiente párrafo.

El viaje-experimento comenzó un lunes a las 10:30 de la mañana en la estación de autobuses de Granada. Allí, en torno a las diez y cuarto el conductor de un autobús Alsa empezó a recoger los billetes de los pasajeros que se arremolinaban en torno a la puerta de acceso. El billete para hacer este trayecto costó 14,10 euros y, pese a que no se concertó un servicio Alsa plus, el modelo de autobús que hizo el trayecto fue de esta gama. El viaje transcurrió con total normalidad y comodidad.

Casi en silencio el autobús circuló hasta Almería donde llegó de manera puntual. Durante el trayecto las decenas de pasajeros que utilizaron este medio de transporte ese día se durmieron o aprovecharon para leer alguna revista. También para consultar este periódico que está a disposición de los viajeros de forma gratuita en este trayecto de Alsa. Poco antes de las 12:30 el autobús accedió a la estación de autobuses de Almería donde rápidamente se bajaron los viajeros y se produjo un auténtico baile de maletas y bienvenidas en una ciudad que ese día estaba gris, con un cielo encapotado de nubes y una lluvia intermitente.

Virginia Zambrano era una de las pasajeras que realizó este recorrido. Según explicó Zambrano no suele realizar con demasiada frecuencia este trayecto en autobús porque prefiere compartir coche a través de la plataforma Blablacar. No obstante, la joven natural de Granada pero que estudia Psicología en la Universidad de Almería, detalló que ese día optó por el autobús por una cuestión de horarios. Sobre la experiencia relató que, aunque es algo más caro que compartir coche, el viaje fue cómodo y el autobús puntual. En cuanto a la posibilidad de hacer el trayecto en tren entre ambas ciudades, Zambrano relató que prefería otros sistemas principalmente por el precio. "El autobús cuesta en torno a catorce-dieciocho euros, el tren más de veinte y en Blablacar viajo por apenas diez".

El viaje-experimento continuó después de pasar la jornada en Almería. Por la tarde llegó el momento de hacer el trayecto de vuelta. En esta ciudad la estación de autobuses y la de trenes comparten infraestructura. Así la intermodalidad entre ambos medios de transporte es total.

A las 18:00 algunos viajeros ya se encontraban en las inmediaciones del convoy, un enorme tren blanco parado en las vías. En ese momento dos revisores comentaban algunos aspectos junto a las puertas de acceso. "No se han vendido apenas billetes", indican. De hecho el tren que conectaba Granada con Sevilla partió de Almería con poco más de quince pasajeros. Y aquí la duda que surge es. Si Bobadilla sigue en obras con motivo de la llegada del AVE, ¿cómo es posible que una persona pueda viajar desde Almería hasta Sevilla? La respuesta es la siguiente. El tren puede ir y venir a Almería porque utiliza las vías de Moreda. Sin embargo, no puede salir hacia Sevilla por Bobadilla pues la vía está cortada por las obras del AVE. Ante esto Adif, que vende títulos de viaje donde pone Granada-Sevilla pone a disposición de los viajeros un autobús en la estación de Andaluces. Así, quien desea hacer el trayecto completo se sube al tren en Almería, se baja en la capital para coger un autobús que lo lleva hasta la ciudad malagueña donde cogerá otro tren con parada en: Antequera Santa Ana, Pedrea, Osuna, Marchena, Dos Hermanas, San Bernardo para, finalmente, llegar a la estación de Sevilla -Santa Justa.

A las 18:15 el tren se puso en marcha con todos los sonidos característicos que eso conlleva. Y, una vez salió de Almería, comenzó la magia. En una tarde de cielos semicubiertos el tren regaló estampas de gran belleza a través de sus grandes cristaleras. El confort de sus asientos se suma a un baño de grandes dimensiones, unos pasillos anchos y la posibilidad de tomar un tenpempié en medio del trayecto gracias a las máquinas expendedoras situadas en un vagón semicentral. También hay una zona habilitada para anclar bicis.

Pese al precio, -en torno a veinte euros-, los pasajeros de este medio de transporte se mostraron encantados con el viaje que les permite trabajar y relajarse. Una joven llamada Ángela Expósito explicó que su trayecto, normalmente es Granada-Guadix o Almería-Guadix. El primero lo suele realizar en autobús porque es más barato. El segundo en este tren porque hay mejores combinaciones y no realiza tantas paradas. A pocos asientos de la joven se encuentra José Manuel Lucas. Según explica suele coger más el tren porque le parece más cómodo. Su trayecto es Almería-Granada y viceversa porque estudia Trabajo Social en la UGR. Y, aunque el precio es algo más caro y el trayecto más largo, Expósito reconoció que le compensa.

Para Eva Carmona el tren también gana la partida. Ella, que vive en Carboneras suele ir hasta Almería en coche y desde aquí a Granada en tren. "Me parece más confortable que el autobús", explicó Carmona quien detalló que con la tarjeta joven el precio es casi igual. Aunque, si hay un fiel defensor del tren en este vagón, ese es Antonio Morillas. Este granadino natural de Albondón es alcalde de Vícar (Almería). "Cuando voy a hacer gestiones a Sevilla siempre voy en tren" explicó Morillas quien destacó que así se puede levantar para estirar las piernas pero también trabajar. Al lado de su asiento lleva un sinfín de documentos. Morillas que fue uno de los pocos pasajeros que ese día hizo el trayecto completo hasta la ciudad hispalense explicó que a pesar de los tiempos menos competitivos el viaje en tren le compensa absolutamente. "Yo creo en el tren. Pienso que es muy importante para el desarrollo de los territorios", explicó este alcalde quien recordó que las mayores movilizaciones que ha habido en Almería, Jaén y Granada en los últimos cien años fueron para solicitar un tren estratégico hasta Málaga. Asimismo, el regidor de Vícar explicó que, al igual que sucede en Granada que lucha por la reconexión ferroviaria, en Almería hay una plataforma "muy potente que defiende el tren de alta velocidad desde Murcia a Almería-Granada a través del litoral mediterráneo. "Yo creo que el tren es una infraestructura muy justa y necesaria y espero que la sociedad se movilice porque se trata de un transporte estratégico desde todos los puntos de vista, social, económico y de desarrollo para el futuro", explicó este alcalde en cuyo municipio se celebró el pasado 22 de febrero una Mesa del Ferrocarril .

En torno a las nueve de la noche el tren irrumpió en la estación de Andaluces. Allí, tanto el alcalde de Vícar como el resto de pasajeros se bajaron rápidamente para subir al autobús con destino a Antequera. Lo hicieron en una ciudad que en abril cumple tres años de aislamiento y que sueña con recuperar los trenes que un día circularon por sus vías. Es imposible inculcar a la ciudadanía el valor del transporte público si éste no se impulsa desde las administraciones.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios