El pasado 29 de enero la Universidad de Granada organizó un interesante debate sobre el futuro del tren en Granada y el papel del Corredor Mediterráneo. La Plataforma Granada por el Corredor Mediterráneo agradece a la UGR (y, en particular, a su rectora, que actuó como anfitriona del debate) su compromiso con el tren, en un momento especialmente importante para el futuro del ferrocarril en la provincia; una provincia en la que "no siempre se consigue que la sociedad civil y las fuerzas políticas remen coordinadamente en la dirección del interés común", según el comunicado que han difundido esta mañana.

Una de las revelaciones más destacadas de ese debate vino de la mano de Sandra García, delegada del Gobierno en Andalucía: el Gobierno pretende esperar a que se termine de ejecutar la conexión ferroviaria entre Murcia y Almería antes de emprender los trabajos de la línea Almería-Granada, por el deseo de evitar el aislamiento ferroviario de la ciudad de Almería. La plataforma Granada por el Corredor Mediterráneo considera este anuncio una noticia decepcionante para la ciudad y la provincia de Granada.

Pues esa planificación acarrearía un retraso considerable en la llegada del Corredor Mediterráneo a Granada y el peligro de que, una vez conectada Almería a través de dicho corredor y Algeciras por el Ramal Central, se abandonara el tramo Almería-Granada-Bobadilla del Corredor Mediterráneo y Granada quedara en tierra de nadie desde el punto de vista ferroviario.

La Plataforma considera que es necesario estudiar alternativas que permitan trabajar simultáneamente en los tramos Murcia-Almería y Almería-Granada del Corredor Mediterráneo sin necesidad de que dejen de llegar trenes a Almería. Una consiste en reconsiderar el proyecto de una línea de altas prestaciones entre Almería y Granada, elaborado por el Ministerio de Fomento hace años y con bastantes trámites superados.

En cualquier caso, se hace "imprescindible" reclamar que se estudien las posibles soluciones que impidan que se retrase de nuevo la llegada a Granada de los trenes de mercancías y de un mayor número de trenes de pasajeros. La sociedad granadina y sus representantes políticos deben olvidar sus diferencias y trabajar coordinadamente en esta reivindicación. La provincia debe, asimismo, establecer urgentemente alianzas con el resto de provincias interesadas en el desarrollo integral del Corredor Mediterráneo, como es el caso de Almería, Murcia y Alicante.

Con este fin la Plataforma Granada por el Corredor Mediterráneo emplaza al alcalde de Granada y al presidente de la Diputación Provincial a una reunión conjunta de la que nazca el impulso para constituir una alianza del sureste por el Corredor Mediterráneo.

Esta alianza, concebida con generosidad y altura de miras, más allá de intereses provinciales o partidistas, debe contribuir decisivamente a la consolidación en España de un modelo reticular y sostenible de transporte de mercancías y viajeros que supere la configuración actual de las comunicaciones terrestres en España, altamente dependiente del petróleo y con una estructura radial centrada en Madrid.