El sábado a las nueve de la noche arrancó una nueva iniciativa solidaria granadina. Dos furgonetas con seis conductores (tres por vehículo) partieron desde el Seminario Diocesano de Granada capital rumbo a Polonia. Tardarán tres días en recorrer los 3.300 kilómetros que les separan de su destino, donde van con cajas de material humanitario para las víctimas de la guerra en Ucrania. Fundamentalmente transportan medicamentos, indican desde la organización de la caravana, promovida por el Arzobispado de Granada y que en un principio iba a salir hoy domingo. La incidencia de la huelga de transportes obligó a la organización a cambiar de planes.

Una vez en suelo polaco, se hará entrega de la ayuda y se regresará a Granada con una veintena de refugiados ucranianos. Son mujeres, menores y ancianos que huyen de la guerra promovida por Putin. Vendrán tantos como quepan en las dos furgonetas, con capacidad para once personas cada una de ellas, lo que suma un total de 22. A estas plazas hay que restar las ocupadas por los conductores, indican desde la organización. "Traerán a los que quepan". Esta misma fuente señala que los refugiados que vengan a Granada ya tienen alojamiento. "Tenemos el contacto de las personas que van a alojarles", señalan al tiempo que destacan la "generosidad" de los granadinos.

El viaje de vuelta será de unos tres días, calculan desde la organización, que insiste en que las dos furgonetas han "ido repletas" de ayuda humanitaria. En cuanto a los conductores, son personas particulares que han puesto sus medios para recorrer media Europa en auxilio de estos refugiados.

Se prevé que la próxima semana parta de Granada una segunda caravana de ayuda al pueblo ucraniano.  Para participar en esta iniciativa, los interesados deben contactar en el correo electrónico ayudaucrania@archidiocesisgranada.es o en los teléfonos 958 21 63 23, 958 21 57 29 y 636 836 347, indica la Curia. En un comunicado se señala que el Arzobispado ha habilitado un cuestionario para las familias granadinas que deseen ofrecer sus hogares para esta acogida de ucranianos cuando lleguen a nuestro país. El formulario está disponible en el siguiente enlace.

Desde el inicio del conflicto el pasado 24 de febrero se han sucedido las acciones solidarias desde Granada. Ese mismo día la Universidad de Granada procedió a ofrecer alojamiento y asesoramiento a un grupo de seis personas, trabajadores de universidades ucranianas, que estaban en la ciudad en unas jornadas de intercambio. El estallido de la guerra les impidió regresar y dos de los profesores atrapados han conseguido traer familiares a Granada. Actualmente son once las personas a las que asiste la UGR, que también trabaja en atender tanto al estudiantado ucraniano en la UGR como al ruso.

Por otro lado, desde la Parroquia del Santo Ángel Custodio, en el Zaidín, se organizó una colecta de material humanitario con destino a los campamentos de refugiados en Polonia. En los dos primeros días de actividad solidaria lograron recoger una tonelada de alimentos, medicamentos y ropa de abrigo. Desde esa misma parroquia, que atiende a la comunidad de fieles católicos ucranianos en Granada, se procedió a organizar la llegada de dos autobuses con exiliados, familiares de ucranianos en España.

Desde la Administración se aborda la planificación de los recursos para atender a los refugiados que están llegando. Así, se prevé el análisis de la posible llegada de menores a los que habrá que escolarizar, indicaron desde la Delegación provincial de Educación.