La Guardia Civil ha decomisado este fin de semana un total de 26 kilos de pescado inmaduro en la localidad de Almuñécar y ha denunciado a los tres jóvenes que estaban ofreciendo el producto en las inmediaciones del mercado del municipio en puestos de venta ambulante. En esta operación contra la distribución de pescado que no supera las talla mínima para su venta participaron guardias civiles del Servicio Marítimo, del Seprona y de Seguridad Ciudadana en la Costa Tropical.

Tras el descubrimiento de este pescado ilegal, las tres personas fueron denunciadas en la localidad de Almuñécar ante la Delegación Territorial de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.

El decomiso del pescado se produjo en la plaza de Los Higuitos del municipio, en las inmediaciones del mercado municipal. Los agentes sorprendieron a los tres jóvenes que vendían de forma ambulante pescado diverso: bogas, jureles, sargos, mejillones y otras especies difícilmente clasificables por su escaso desarrollo.

El pescado decomisado fue declarado "no apto" para el consumo por el veterinario del Servicio Andaluz de Salud ya que no se puede acreditar su trazabilidad y no existe ninguna garantía de que haya pasado por ningún control sanitario, según informó el Instituto Armado en una nota.

Con posterioridad, el pescado inmaduro intervenido fue trasladadado a la planta de tratamiento de residuos sólidos urbanos de Vélez de Benaudalla para su destrucción.

La Guardia Civil alertó además de que la venta ilegal de este producto puede poner en peligro la salud pública ya que no se puede acreditar su trazabilidad, es decir, de dónde procede; y tampoco pasa el control sanitario necesario antes de llegar al consumidor. Esta actuación es una más de las que regularmente lleva a cabo la Guardia Civil en la provincia de Granada contra estas prácticas ilegales, tanto la de la captura de pescado inmaduro, como su posterior distribución.