Insólito es que en una ciudad se pueda tocar música en cualquier lado. Sobre todo en Granada donde hasta para tocar en las calles hace falta una autorización. Sin embargo, incluso las instituciones son conscientes, a veces, de lo importante que es la cultura y la música para fomentar otras actividades, como por ejemplo el comercio. Por lo que no es raro que este se repita la experiencia del Insólito Festival, en el que grupos de la música de la ciudad tocan en establecimientos para potenciar el comercio. Los escenarios serán once locales diferentes del Realejo, ese barrio que combina mejor que ninguno la tradición y la vanguardia.

Todo el fin de semana habrá música en los establecimientos del Realejo, en una propuesta impulsada por alumnos de la Escuela Superior de Comunicación Audiovisual (Escav), que graban los vídeos de los conciertos para subirlos posteriormente a internet. Además, el festival cuenta con el apoyo de la concejalías de Juventud y de Comercio del Ayuntamiento de Granada, así como del Instituto Andaluz de la Juventud, dependiente de la Junta.

El cartel acoge a bandas jóvenes, pero con reconocimiento dentro de la escena granadina. Se trata de un programa variado en el que caben todos los estilos, acorde con una ciudad capaz de absorber diferentes cultura. Los grupos son: Vúfalo, Pipo Experience, Bisagra, Fletán Fetén, Trepàt, Dolorosa, Monte Terror, Royal Mail, Copa Turbo y el selector musical Labase Martínez. Todos ellos, actuarán gratis en cada uno de los establecimientos que se han apuntado al Insólito Festival

En esta segunda edición son once los locales que se han sumado al festival. Los comercios adheridos son: un bar, un supermercado ecológico, una peluquería, una cafetería, un hotel, una farmacia, una galería de arte, una librería y una pescadería. Lo que está claro es que la idea ha cuajado en el espíritu del barrio del Realejo, puesto que el año pasado, el primero en el que el festival era un experiencia piloto, participaron tres locales menos (8).