La Comisión de Cultura del Senado aprobó ayer, con los únicos votos a favor del PP, la moción de este grupo que pide que la Toma de Granada, que conmemora, el 2 de enero, la entrega en 1492 del reino de Granada a los Reyes Católicos y, con ello, el fin de la Reconquista, sea incluida en el Plan Nacional de Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial.

El 'popular' Antonio Ayllón fue el encargado de defender la iniciativa y para ello expuso que la conmemoración celebra desde hace 500 años y de forma ininterrumpida "la llegada de la modernidad, el nacimiento del Estado moderno, la unificación histórica de la Península Ibérica, pretendida por el ideal de reconquista desde el momento de la invasión musulmana".

El Grupo Popular justifica su petición en que se trata de "una gesta de magnitud universal" considerada como "el suceso más relevante de la historia de España" y que su "celebración" tiene un respaldo popular y social "mayoritario" y constituye una "reliquia histórica" que es necesario preservar y transmitir.

Sin embargo, el PSOE expuso en el debate una postura totalmente distinta y el senador Juan Manuel Fernández Ortega indicó que no es una conmemoración que cuente con el apoyo unánime de la sociedad granadina, sino que es, fundamentalmente, una celebración para las autoridades eclesiásticas y que suscita la presencia de grupos fascistas y antifascistas que incluso han llegado a protagonizar episodios de violencia física.

Pero, además, para el socialista, la petición del PP no cumple con el procedimiento para la declaración ya que tiene que ser la propia comunidad local la que proponga un reconocimiento de ese tipo y la comunidad autónoma la que presente el primer borrador que debe ser revisado por el Ministerio de Cultura. Así, recordó que el Parlamento andaluz ya se ha manifestado en contra de solicitar esa declaración y que la conmemoración ha suscitado manifestaciones en contra de algunas personalidades como el escritor fallecido Francisco Ayala o el ex ministro Manuel Pimentel.

De ese modo, el socialista pidió al PP "sensatez" para retirar la iniciativa y "no dejarse llevar por sus propias convicciones porque a veces parece que quieren reescribir la historia". Además, Fernández Ortega reclamó que se "revise" la forma en la que se celebra la conmemoración porque "no tiene sentido que se haga con una misa" y defendió que hay mejores ejemplos, como el Cascamorras o las Capitulaciones, para merecer esa declaración de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

Sin embargo, Ayllón, tras condenar las manifestaciones antidemocráticas que puedan producirse con motivo de la conmemoración, dijo que en la "fiesta" se expresa el "prestigio histórico sobre la reunificación de España" y recordó que la misma se ha celebrado con todo tipo de gobiernos "de todos los signos", incluso durante las repúblicas o con gobiernos locales de PSOE e IU. Para el senador 'popular' tampoco es cierto que la Toma no cuente con el apoyo de los granadinos y censuró el "nuevo progresismo anquilosado" de los socialistas, a los que recordó que cargos de la Junta sí suelen participar en actos de "moros y cristianos".