Granada tiene experiencia histórica en terremotos por encontrarse en una de las zonas más activas del país por la confluencia de varias fallas. Además, cada ciertos años se pueden producir episodios como los enjambres sísmicos, el más reciente hace un año. Por eso no es de extrañar que para formar a especialistas en la atención ante eventos sísmicos, Granada sea un lugar de referencia.

El edificio de la Real Chancillería de Granada, sede del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), ha sido esta mañana el escenario de un simulacro consistente en un episodio sísmico de intensidad moderada, que produce daños de diversa consideración en el citado edificio. En base a este escenario de actuación, se han llevado a cabo una serie de actuaciones de sostenimiento y refuerzo de diversos elementos constructivos, situados en la fachada principal.

Un momento del simulacro de terremoto en el TSJA

Este ejercicio simulado, en el que han participado unidades de emergencia y gestión de riesgos para la protección del patrimonio histórico-cultural de las administraciones estatal y autonómica, así como el Servicio de Extinción de Incendios y Protección Civil del Ayuntamiento de Granada y la Unidad Militar de Emergencias (UME), forma parte de las jornadas sobre “Protección del Patrimonio Histórico y Cultural en Emergencias Sísmicas” que imparte la Escuela Nacional de Protección Civil en colaboración con la Subdelegación del Gobierno entre el 12 y 13 de mayo.

Según ha explicado la subdelegada, Inmaculada López Calahorro, esta actividad formativa, novedosa en la comunidad autónoma, tiene como objetivo “ofrecer una formación específica al personal interviniente en emergencias, con la finalidad de dotarles de una capacitación técnica y entrenamiento, acordes con la importancia de su misión de protección de nuestro importante patrimonio histórico-cultural”.

A este ejercicio práctico también han asistido el presidente del TSJA, Lorenzo del Río; el delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía, Pablo García y el capitán de la UME, Enrique Francos.

La formación específica tiene carácter interdisciplinar y en la misma se pone de relieve la importancia que para todas las instituciones públicas tiene la protección y conservación de bienes histórico-patrimoniales, ante la eventualidad de alguna emergencia sísmica.

La realización de este ejercicio ha requerido identificar un edificio emblemático, bien conservado, integrante del Patrimonio Histórico-Cultural de Granada y ubicado en zona centro de la capital, para facilitar el desplazamiento de los alumnos desde la sede de la actividad formativa en la Subdelegación del Gobierno en Granada. El bien inmueble elegido ha sido la Real Chancillería de Granada, edificio de gran valor histórico, exponente señero de arquitectura civil, actualmente sede del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.

Apuntalamiento, estabilización y protección

Durante la jornada se han puesto en práctica técnicas de apuntalamiento sobre una puerta adintelada junto a la puerta central, en fachada principal; e intervenciones de sostenimiento y estabilización de dos pináculos decorativos, ubicados sobre balaustrada de piedra, situados en parte derecha de fachada principal y fachada lateral colindante.

Por último, se ha llevado a cabo un ejercicio de protección sobre bienes mueble, consistente en la retirada y salvaguarda de diversos objetos (cuadros, muebles, libros, etc), que simulan bienes patrimoniales de elevado valor histórico, debidamente catalogados y priorizados en su evacuación.

El desarrollo de un simulacro de actuación sobre un edificio histórico singular, en un entorno urbano como Granada capital, contribuye a potenciar, si cabe, la difusión a la sociedad de la necesidad e importancia de la protección y preservación de estos bienes patrimoniales protegidos; al tiempo que es un claro ejemplo de coordinación inter-institucional y colaboración de unidades técnicas especializadas, procedentes de distintos ámbitos de las Administraciones Públicas.

Se resalta la importancia que tiene para todas las Instituciones que el personal interviniente en emergencias disponga de una capacitación técnica y entrenamiento, acordes a la importancia de su misión, con la finalidad de afrontar con la máxima garantía la protección de nuestro rico Patrimonio Histórico-Cultural, del que es ejemplo relevante la Real Chancillería de Granada.