La Demarcación de Carreteras del Estado en Granada investiga las causas de un hundimiento de la calzada en los kilómetros 136 y 134 de la Segunda Circunvalación, justo en el nudo de salida y entrada a la localidad de Alhendín. El bache en la zona se ha ido agravando con el paso de los meses y del uso de la infraestructura, en un segmento de carretera que abarca 1,2 kilómetros, y que de forma reciente obligó a la DGT a colocar discos de reducción de velocidad provisionales, bajando de 100 a 80 kilómetros por hora en el lugar.

Según informa el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, a preguntas de esta redacción, los técnicos responsables de la Demarcación de Carreteras en Andalucía Oriental, que tiene su sede en Granada capital, investigan las causas de "los hundimientos" en la zona "y tiene previsto acometer los trabajos de regularización que sean necesarios" para solucionar el problema. Además, el Ministerio explica que "este tipo de hechos actualmente no afectan a la seguridad vial, siempre y cuando se respeten los límites de velocidad indicados en las señales".

La zona en cuestión, que es en concreto en el enlace de Alhendín con la nueva carretera, está limitada a 100 kilómetros por hora, al ser una parte de la autovía bastante sinuosa que engancha subidas, bajadas y varias curvas de un radio relativamente cerrado. Pero de forma reciente se ha limitado aún aceleración del área, limitándola a 80 kilómetros por hora. Esta nueva señalización, se color amarillo que significa provisionalidad, indica un empeoramiento de la rotura, ya que previamente se indicaba solo la presencia de un tramo de 1,2 kilómetros de baches.

La presencia de estos baches se remonta a, al menos, diciembre del año 2021, donde ya se indicaba la presencia de estos en ese tramo. Es decir, solo un año después de la inauguración de la nueva A-44 ya había problema de deterioro de la vía, entrando, directamente, en el largo historial de desperfectos que han afectado a las grandes autovías construidas en la provincia de Granada, desde la A-7 de la Costa hasta la A-92, archiconocida por sus problemas de socavones y badenes sufridos a lo largo de sus ya treinta años de historia.

Se da la circunstancia de que el tramo en el que han aparecido estos baches fue uno de los últimos en terminarse antes de inaugurar la Segunda Circunvalación de Granada, cuya función era desviar el tráfico, sobre todo de vehículos pesados, que soporta la GR-43, la Primera Circunvalación, y que de momento cumple esta función aunque esta reducción del tránsito de vehículos privados no se haya notado tanto.

En noviembre de 2020, apenas dos meses antes de la apertura de la vía, en el tramo Las Gabias-Alhendín, en el cual se sitúan los puntos bacheados, tanto en sentido Jaén como Motril, no se había terminado de colocar la capa de rodadura asfáltica en una zona que, además, entroncaba con los últimos metros del tramo Las Gabias-Santa Fe, que seguían en ese momento con las obras de infraestructura del puente, o paso superior, sobre la carretera A-338 hacia La Malahá.

El avance de las obras del tramo con estos desperfectos fue el más rápido de todos. Un año antes de la apertura de la Variante Exterior de Granada (Navidad de 2019), el segmento Alhendín-Las Gabias tenía las obras más atrasadas con un 78,2% de ejecución, que subieron un 8,8% más en los seis meses siguientes (junio de 2020), por lo que de ahí a la inauguración a finales de ese mismo año la velocidad de ejecución fue un 13% más rápida. Además, este punto sufrió una serie de retrasos y modificaciones que fueron retrasando en los años anteriores la ejecución de las obras.

Además, la proximidad del tramo Las Gabias-Santa Fe, que sufrió una serie de problemas geotécnicos que obligaron a modificar una de las estructuras de obra desde casi el principio, con el consiguiente retraso, afectó a los tiempos de la construcción que hicieron que las obras cogiesen velocidad para llegar a tiempo a la inauguración prevista antes del año 2021.