El carril ciclopeatonal entre Armilla y el PTS, cerca de desbloquearse: Ayuntamiento y Junta llegan a un acuerdo para replantear la obra

La infraestructura lleva parada casi un año y medio debido a encontrarse con el vial de acceso al Centro Comercial Nevada Shopping

Armilla pide abrir provisionalmente el carril entre el PTS y el Nevada mientras se encuentra una solución definitiva

Imagen de archivo de las obras del carril ciclopeatonal entre el PTS y Armilla / G. H.

La apertura del carril ciclopeatonal que une la zona del PTS de Granada y el entorno del Centro Comercial Nevada en Armilla parece estar de nuevo encaminada. Tras casi un año y medio de paralización de las obras de la infraestructura, el Ayuntamiento armillero y la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía, encargada de las obras, han conseguido llegar a un punto de acuerdo que satisface a ambas partes para que la obra pueda proseguir y finalizar el proyecto.

Esta infraestructura, clave para garantizar la seguridad de peatones y ciclistas que cruzan de un lado a otro de ambas zonas, podrá seguir adelante gracias a un replanteo de la obra, de tal forma que lo que falta de carril se pueda construir entre el vial de acceso al centro comercial y las vías del Metro. Esto reducirá mucho la anchura del carril ciclopeatonal, ya que el espacio entre ambas zonas es relativamente estrecho, pero es una solución viable y factible para dar vida a una senda que nació para solucionar un problema y terminó convirtiéndose en un problema en si misma.

Según han destacado fuentes del Ayuntamiento de Armilla, en las últimas semanas los responsables municipales y del gobierno andaluz decidieron 'enterrar el hacha de guerra' que ambas mantenían por los problemas de continuidad del carril y se sentaron para plantear una solución. Un entendimiento que quedó ejemplificado la semana pasada, cuando la consejera Rocío Díaz y la alcaldesa armillera Loli Cañavate se reunieron para seguir adelante con el proyecto aprovechando una visita de Fomento a las obras de ampliación del Metro de Granada.

Para poder plantear la solución de construir el carril entre las vías y la carretera de acceso al centro comercial, desde el Ayuntamiento de Armilla se confirma que el Consistorio será el que financie lo que queda de carril, aportando una cantidad de 180.000 euros. Falta todavía confirmación por parte de los servicios jurídicos de la Junta de Andalucía, pero todo está en marcha, y se espera que en próximas semanas se firme el acuerdo.

Una vez se firme el acuerdo, Fomento tendrá que replantear el proyecto de obra del carril ciclopeatonal para adaptarlo y aplicar la remodelación. Esto no será inmediato, ya que hay que rehacer todo el proyecto, pero al no verse afectada ninguna infraestructura crítica se espera que el retraso no sea demasiado importante. No se han querido dar fechas, pero todo apunta a la primavera como primera época posible para retomar la intervención.

Desde el Ayuntamiento de Armilla confirman que la nueva variante del carril ciclopeatonal, pese a que será más estrecha al ir 'encajada' entre las vías del Metro y la carretera de acceso al centro comercial, contará con todas las medidas de seguridad y garantías para evitar que los peatones invadan cualquiera de las otras dos infraestructuras.

Dos años y medio para una obra de ocho meses

El carril ciclopeatonal entre la zona del PTS y Armilla, que nació para que los peatones y ciclistas que quisieran pasar de un lado a otro de ambas zonas no tuvieran que hacerlo cruzando ramales de autovía ni rotondas cargadas de tráfico poniendo en riesgo su seguridad, fue planteado como la solución a un problema y terminó convirtiéndose en lo que quería solucionar. Su construcción desde el entorno de la Avenida del Conocimiento arrancó en febrero de 2023, y el proyecto estimaba ocho meses para su finalización.

Sin embargo, todo comenzó torcido. Primero tuvo que sortear por debajo el ramal de acceso a Armilla que se deriva de la Autovía de Circunvalación, para lo que tuvo que cortar el tráfico del mismo durante dos semanas. Pero después llegó el principal problema: el cajón bajo la GR-30. La colocación de esta pionera infraestructura generó hundimientos en la principal autovía de Granada, y obligó a detener las obras para asegurar la infraestructura, y para ralentizar el proceso de colocación del tunel que daría acceso a Armilla. Esto alargó mucho los tiempos.

Una vez solucionado esto, los trabajos continuaron a buen ritmo, pero una vez se toparon con el vial de acceso del Centro Comercial Nevada Shopping, volvió a llegar la parálisis. Junta y Ayuntamiento de Armilla se enfrascaron en una confrontación sobre a quién pertenecían los suelos que obligó a pararlo todo. Una parálisis que se alarga desde hace casi año y medio.

La solución final ha sido, literalmente, tirar por la calle del medio. Dejar los accesos al centro comercial tal y como están, ya que tratar de modificarlo retrasaría aún más la situación, y reducir el ancho del carril ciclopeatonal para meterlo entre la carretera y la vía, y poder así finalizar los menos de 200 metros que quedan hasta llegar a la rotonda que comparten la Avenida de las Palmeras, la N-323a, la calle Darwin y los ramales de acceso a la GR-30, punto en el que concluye la infraestructura.

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