Un centenar de medidas urgentes y 9 declaraciones de ruina durante un año

Urbanismo

Los problemas en fachadas son los más comunes en los casos de conservación

Un centenar de medidas urgentes y 9 declaraciones de ruina durante un año
Un centenar de medidas urgentes y 9 declaraciones de ruina durante un año / Jesús Jiménez / Photographerssports

Respecto a los expedientes de conservación y ruinas de los edificios, una vez que se procedió a inventariar todos los expedientes existentes desde 2003 en el Ayuntamiento de Granada, se ha continuado con el trabajo de revisión. El número de nuevos expedientes de mal estado y conservación iniciados en los distintos años para los que se ha acordado una orden de ejecución, ha sido variable. Así, en 2019 ha sido 108, la cifra más baja desde 2003. En 2018 fueron 181, por lo que el descenso ha sido considerable y deja estos expedientes muy lejos de los 231 de 2005.

Según el área de Urbanismo, ha habido un aumento del número de actuaciones municipales por edificios en mal estado “coincidiendo con los ciclos de mayor pluviometría en 2005, 2010 y 2018, aparte de los factores sociales, económicos y de antigüedad de la edificación”. “No obstante, el control sobre las edificaciones de más de 50 años a través de la Inspección Técnica de Edificios (ITE) y del posterior Informe de Evaluación de los Edificios (IEE) que se ha realizado, a partir de 2012 ha actuado como instrumento de prevención y vigilancia sobre las edificaciones más antiguas”, incide el informe.

Para la resolución y cumplimiento de las órdenes de ejecución, existe una demora media de más de un año debido a distintos factores como la localización de propietarios, reticencia en la ejecución, alegaciones, recursos ordinarios y recursos contenciosos-administrativos.

En 2019 hubo 296 acuerdos adoptados por decreto y estuvieron motivados a nivel general para corregir deficiencias en los edificios como mal estado generalizado, mal estado de cubiertas, de fachada (las más numerosas), de elementos estructurales, en talud, pozos, cuevas y árboles, en medianeras, instalaciones, por incendios o por seguridad en obras paradas. También hay medidas complementarias no urgentes, de accesibilidad o vallado de solares con peligro.

El servicio destaca que “algo más del 45% de los acuerdos lo han sido para la orden de ejecución de medidas urgentes o declaraciones de ruina legal urbanística o inminente, con su respectiva orden de actuación inmediata, siendo los problemas en elementos de fachada, cubierta e instalaciones, los más destacados”. Los acuerdos por incendios han sido en su mayor medida por el realojo de los vecinos, al haber terminado las obras del incendio que se produjo en la calle San Juan de Letrán.

Debido al incumplimiento de las medidas ordenadas se iniciaron en 2019 15 procedimientos para su ejecución forzosa mediante multas coercitivas o ejecución subsidiaria.

En cuanto a los acuerdos, hubo 103 de medidas urgentes, 24 de complementarias, 65 archivos, 9 declaraciones de ruina (8 ruina física inminente y 1 ruina legal urbanística), 15 incumplimientos de lo ordenado, 2 devoluciones de fianzas.

Ejecuciones subsidiarias para anticipar las actuaciones

Estas obras se realizan principalmente para las actuaciones urgentes o de emergencia. Para el resto de las actuaciones, se ha iniciado preferentemente el procedimiento de multas coercitivas como sistema de ejecución forzosa. Por otro lado, siempre que no existe peligro por la demora, como en las demoliciones para restauración del orden urbanístico de disciplina, se ha puesto al cobro el coste de la ejecución subsidiaria como liquidación provisional, para una vez recaudado el importe realizar la actuación. la actividad de ejecución subsidiaria comienza de forma significativa en 2004 manteniéndose parámetros similares, excepto en los años 2009 a 2011 donde hubo mayor número de actuaciones, la gran mayoría provocado por la incidencia de los fenómenos meteorológicos de esos años.

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