Clamor de los vecinos de Norte: Cortes de luz en plena ola de calor y recibos de 200 euros

"No podemos más. Esto es inhumano". Es una de las frases pronunciadas este miércoles por una vecina de la zona Norte de Granada pero recoge la opinión de todo un distrito. Un distrito con barrios que sufren desde hace años cortes de luz diarios y que en plena ola de calor, cuando la preocupación de la mayoría de los ciudadanos es resguardarse en un sitio con aire acondicionado, viven con cortes de luz diarios, en algunas zonas de varias horas. E incluso días. Un grupo de vecinas de La Paz explicaba que han estado los últimos tres días sin luz pese a pagar sus recibos. Desde el 29 de junio llegó el 1 de julio por la noche. Una situación realmente inhumana y de emergencia social, por lo que claman soluciones, ya cansados pero con esperanza de que se arregle, por lo que seguirán luchando para que se les escuche. Porque ponen un ejemplo muy significativo: "El día del apagón para nosotros fue un día normal".

La impotencia está en que son vecinos que pagan sus recibos: "Pagamos de más, recibos de más de 200 euros nos llegan cuando nos dejan sin luz, por lo que estamos pagando la luz de los demás", dicen en la convocatoria realizada por la Plataforma contra los Cortes de Luz del distrito Norte para denunciar los cortes de luz que siguen sufriendo en un problema de hace más de una década al que no se da solución. "En plena ola de calor con más de 40 grados hay familias que aún pagando sus recibos no tienen luz. Esto no es normal ni podemos acostumbrarnos a ello. Hay personas que viven con miedo a que se les apague la luz", reclama Celia del Castillo, de la plataforma, que insiste: "No podemos más. No se puede vivir así solo por habitar en el distrito Norte. Esto no pasa en otro distrito o barrio de la ciudad", asegura, lamentando que "se siga desviando la atención a la marihuana". "No hablamos de plantas sino de personas que necesitan luz para vivir con dignidad", asegura en la rueda de prensa, donde han estado en apoyo también representantes de PSOE y de IU.

20 días de cortes diarios en Cartuja

Teresa Heredia ha explicado que en el distrito se llevan ya 15 años con los problemas de cortes de luz, que afectan principalmente a Casería de Montijo, Almanjáyar, Cartuja y La Paz. En concreto en Cartuja explica que empezaron con cortes más continuos el 14 de junio con el Corpus, con hasta cinco y seis horas diarias sin luz. "Se nos va a las siete de la tarde y hasta las doce no hay luz. Y deja a personas mayores y dependientes esperando en la calle con el calor a que vuelva la luz para poder subir en ascensor a sus casas, gente con cuadros de ansiedad, alimentos que tenemos que tirar, electrodomésticos que se estropean y esto nadie nos lo paga. En los últimos 20 días, Endesa nos ha robado tres días completos de luz" sumando los cortes de horas diarios. "Y la mayoría de las familias paga sus facturas y viven sin luz, por lo que es una patada a los derechos humanos. No podemos llevar una vida normalizada, estudiar, trabajar, vivir, descansar. Somos clientes de segunda para Endesa", dice Heredia.

A la compañía le exigen que "cumpla el contrato" y a las administraciones "que obliguen a Endesa a que atienda a sus clientes que pagan la luz. Queremos nuestros derechos". Un mensaje claro para que Endesa les garantice "un servicio ininterrumpido" y para que el Ayuntamiento haga valer su potestad en exigir el cumplimiento de la relación contractual de los vecinos. "Exigimos el servicio ya, sin dilación", aseguran, reconociendo alguna mejora respecto a otros años pero sin ser nada suficiente.

Y la burocracia que se dice que mejoran para atender las llamadas ante incidencias no se notan en el día a día: "Llamas y te pasas 20 minutos esperando escuchando una música que te pone de los nervios y si te contestan te dicen que no hay incidencia cuando tú estás sin luz", dicen vecinas de La Paz. En el caso de Cartuja, Endesa les está diciendo que desde hace 20 días "hay una avería y nos dicen la hora a la que volverá, pero llevan 20 días con la avería y no le dan solución", dice Heredia. Del Castillo incide en que desde julio a enero del año pasado tenían entre 3 y 5 cortes diarios. "Hay mucha precariedad y tenemos un contrato que exigimos que se cumplan".

Una vida pendiente de la luz en un verano a 40 grados

Ana María Martín, de La Paz, relata los tres días que han estado sin luz. "Y ahora cuando vayamos no sabemos si tendremos". "Yo tengo una libreta en la que apunto todos los cortes de luz, el día y la hora", junto al número de incidencia, cuando se lo dan. En casa tiene que tener la estufa de butano para el invierno, la hornilla también de butano, porque si no no podría ni comer. También relata la cantidad de comida que ha tenido que tirar por tener el frigorífico parado y el congelador descongelado. Vive en la calle Juan Latino, al lado de su madre, de 84 años, que tampoco puede ver la tele para entretenerse, ahora tener luz para poner un ventilador. "Es horroroso", relata junto a Eulalia Heredia y Carmen Arantave, vecinas de la misma calle. Ellas recuerdan que son vecinas de toda la vida del barrio y que no se puede vivir. También de la Paz, de Darío de Regollos, aporta su testimonio Encarna Ruescas, que asegura tener "impotencia" por esta situación, que le genera ansiedad para la que se está incluso medicando porque la situación afecta ya a su salud.

"Para nosotros el día del apagón fue un día normal porque tenemos días de 12 horas sin luz y luego nos dicen que no hay incidencias", dice Martín, que asegura que no se puede ir del barrio por su madre y que la situación afecta también a los jóvenes, como su hija, que se ha tenido que sacar una carrera "con la luz de las linternas" y opositar "dejándose los ojos".

Además se dan otras situaciones como tener que ir a cargar móviles y aparatos eléctricos al centro de Norte para no perder tampoco las comunicaciones y estar aún más aislados, o tener que hacer en invierno en plenas navidades "lumbres" en las calles para pasar la Nochebuena porque en casa no tienen luz.

Y todo esto pagando sus recibos, por lo que la situación sigue siendo urgente hasta que no haya solución para estos vecinos.