La Fundación Carlos Ballesta adquiere una carta firmada por Isabel la Católica

En ella la reina española avala el Regio Patronato y el control eclesiástico de Granada

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Una empleada de la Fundación señala la carta adquirida
Una empleada de la Fundación señala la carta adquirida / Andrés Cárdenas

La exposición permanente de la Fundación Carlos Ballesta, en el carmen Aben Humeya del Albaicín, cuenta desde hace unos días con una carta firmada por la reina Isabel la Católica en la que avala el Regio Patronato y el control eclesiástico de Granada.

Tras el matrimonio de Isabel y Fernando, los Reyes Católicos, la monarquía española se fortalece al unirse las coronas de Castilla y Aragón. La corona de Aragón tenía una importante influencia en la península itálica y especialmente con el papado romano. A raíz de ahí los Reyes Católicos establecen ante el Vaticano en 1475 la primera embajada permanente de Europa. La embajada se establece en lo que hoy es el Palacio de Monaldeschi, en Roma. La buena actuación de los embajadores españoles permitió fortalecer las relaciones de la corona española con el papado. Fernando el Católico firma en 1480 los primeros acuerdos con los Estados Pontificios. Como consecuencia de esos acuerdos en 1482 el papa Sixto IV dicta una bula en la que se declara la llamada Guerra de Granada, que durará diez años. Sería la última cruzada contra el Islam. Con esa bula el papa cedía los derechos de la Iglesia (diezmos) y beneficios de conquista a los Reyes Católicos para costear la guerra. Años después, en 13 de diciembre de 1486, el papa Inocencio VIII otorga a la corona española el llamado Regio Patronato, en el que cedía a los monarcas españoles toda la autoridad eclesiástica, aunque no divina. Tampoco podían participar en cuestiones teológicas. Este Regio Patronato permitía a los reyes construir iglesias y catedrales, nombrar cargos religiosos y reorganizar parroquias y obispados.

Este documento adquirido por la Fundación Carlos Ballesta, una joya bibliográfica de gran valor, refuerza el vínculo entre la monarquía y la Iglesia en la gestión del territorio conquistado. Entre los prelados designados por los Reyes Católicos desde la conquista de Granada, destacaron figuras como Hernando de Talavera, el cardenal Cisneros, Pedro Guerrero, Pedro de Deza o Pedro de Castro con el que terminó el periodo. Todos ellos habían desempeñado cargos funcionariales previamente, los últimos como presidentes de la Real Chancillería de Granada.

La carta manuscrita con la firma ‘Yo, la Reyna’, está fechada el 26 de noviembre de 1491, unos meses antes de la Toma de Granada. Y escrita en el Real de la Vega, hoy Santa Fe, en donde se firmaron la Capitulaciones de la ciudad de Granada entre los reyes Fernando e Isabel y los alcaides Yusuf ibn Comixa y Abul Casim al-Muley en nombre del rey Boabdil.

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