Granada, una ‘isla’ eléctrica con la oportunidad de atraer nuevas industrias tecnológicas a la provincia

Cuenta con casi la mitad de la demanda eléctrica libre de toda Andalucía, mientras que en las vecinas Málaga, Almería y Jaén están colapsadas

La mitad de las peticiones de acceso a la red eléctrica en Andalucía son rechazadas

Una de las claves para que haya tanta potencia disponible fue la apertura del eje Caparacena-Baza.
Una de las claves para que haya tanta potencia disponible fue la apertura del eje Caparacena-Baza. / Antonio L. Juárez / PicWild

Granada fue el epicentro del gran apagón del pasado 28 de abril. Aunque el Gobierno lo mantenga casi en secreto, pero todo el sector da por sabido que el primer fallo se produjo en Huéneja, donde hay uno de los nodos de alta tensión de la provincia. Esto puso sobre la mesa, una vez más, el déficit en infraestructuras de la provincia, en este caso las eléctricas. Pero no todo pinta tan mal, depende de la lectura que se haga. Granada es la provincia andaluza con mayor capacidad de demanda eléctrica firme disponible, casi la mitad, el 44,71%. O lo que es lo mismo: 470 megavatios listos para usarse en empresas grandes de 1.051 que quedan en toda Andalucía. Todo en un contexto donde las provincias de Almería y Málaga están completamente saturadas y no pueden asumir nuevos proyectos de demanda eléctrica, mientras que en Jaén solo queda libres 13. Una oportunidad que deja entrever otro problema: las empresas no apuestan por Granada.

La publicación hace una semana de los mapas de capacidad de la red eléctrica de e-distribución, marca de Endesa para este rubro, puso de manifiesto la oportunidad que tiene Granada ante sí, en un contexto ya no solo de saturación de los nodos andaluces, sino también de que la mitad de las peticiones de acceso que formulan las empresas a la red eléctrica de distribución en la región son rechazadas.

En Granada hay disponibles 470 de los 1.051 megavatios que quedan libres en los 819 nudos eléctricos de Andalucía, y donde 82 se encuentran en la provincia. Esta cifra tiene como referente más cercano los 194 libres de Sevilla o los 181 de Córdoba, por ejemplo.

Así que Granada tiene el 47,4% de toda su capacidad, 992 megavatios, disponibles, algo que los expertos apuntan a dos factores: la apertura del tramo Caparacena-Baza de alta tensión, y la repotenciación del eje del valle de Lecrín por Saleres, acometidos por Red Eléctrica. En su día, la primera infraestructura era un anhelo largamente demandado por las comarcas del norte de la provincia para la instalación de nuevas empresas que ayudaran a fijar población en un territorio marcado por la emigración. De momento, siguen esperando todos esos megavatios.

Lo que quiere granada

Y es que el factor clave de todo esto es por qué es tan importante tener demanda disponible para las empresas de sectores como la industria estratégica, los centros de datos, una actividad íntimamente relacionada con la inteligencia artificial, servicios de cloud (nube), almacenamiento de baterías, pero también con las de retroalimentación del sistema como las plantas de generación de energías renovables, o aparte de todo esto, desarrollos urbanísticos nuevos. El potencial de Granada tiene desde hace años el objetivo de convertirse en referente de todos estos.

Este tipo de empresas o iniciativas a las que aspira tener Granada, y a los que la provincia ahora puede ofrecer seguridad a la hora de instalarse en la provincia, se caracterizan por requerir una gran demanda eléctrica, por encima de los cinco megavatios. Sin embargo, a nivel nacional, los gigantes tecnológicos se están encontrando con cada vez más dificultades debido a la saturación de las infraestructuras, que en muchos casos, está poniendo el contrapunto a las oportunidades que ofrece España, con suelo industrial barato y un ‘mix’ energético verde que le hace generar la cantidad eléctrica suficiente para instalarse.

Granada y su conversión en referente tecnológico tiene la ocasión ahora de venderse en este panorama. Se junta el suelo industrial disponible en polígonos como el Citai de Escúzar, que además será un polo aún mayor de generación de interés con la futura construcción del acelerador de partículas IFMIF-Dones (el cual requerirá de grandes cantidades de electricidad para su funcionamiento). De hecho, parte de los ejes de transporte de alta tensión de la provincia se están diseñando para que estén cerca de la instalación.

A toda la industria auxiliar que genere el IFMIF-Dones se le sumará el potencial en inteligencia artificial que se consolidará en Granada con la apertura del Centro de IA de Andalucía en los próximos meses. Además, la capital empieza a tejer un entramado cada vez mayor relacionado con las tecnológicas. Recientemente, Telefónica abrió en el Zaidín un Centro de Talento y Tecnología que se centra en la ciberseguridad y los servicios cloud de la compañía.

Y falta una conexión

Y todo ello con el añadido de que aún queda por completar el circuito de alta tensión a 440 kilovoltios entre Baza y La Ribina, en Almería, que conectará Granada con los grandes ejes del Levante español, y que darán salida a los proyectos de renovables que están previstos y a la espera de aprobación y construcción en las comarcas del Norte de la provincia.

En datos puros, Granada cuenta con 82 nudos de conexión a la red eléctrica de demanda, de los que 60 están saturados, aunque estos tienen una gran potencia disponible. Los más importantes son la de El Fargue, con 88 megavatios libres, seguido de Caparacena, en Atarfe, con 80, destacando también los 52 megavatios disponibles en Grelva (Puleva), en Granada capital, y los 43 de Las Gabias.

El resto de nodos con capacidad firme dispuesta son otros 18, entre los 22 y 1 megavatios libres, la mayoría en Granada ciudad, pero también en Albolote, Atarfe, Santa Fe, Armilla, Las Gabias, Iznalloz y Pulianas.

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