La investigación de los amaños apunta a "otro grupo criminal" y una "guerra fría" con tintes políticos dentro de la Policía Local de Granada

El sumario de la instrucción de la macrocausa del posible amaño de oposiciones en la Policía Local de Granada revela en sus miles de folios indicios de la existencia de un grupo criminal dirigido presuntamente por el exjefe policial durante tres mandatos del PP, José Manuel Jiménez Avilés, para supuestamente favorecer a aspirantes en procesos de oposiciones y promoción interna, la mayoría familiares de policías y suyos propios. Pero hay más claves aportadas en los informes de la UDEF y de la jueza de Instrucción 4 que avanzan más ramificaciones del caso, al apuntar directamente a otro posible "grupo criminal" de amaños dentro de la Policía. Tras levantarse el secreto, se abrieron dos piezas separadas, ambas secretas, para analizar información de dispositivos electrónicos de dos subinspectores, ambos investigados en la causa principal, que serían clave para esclarecer esta teoría y detallar además cómo se producían los amaños, además de la intención de profundizar en el estudio de un grupo de whatsapp descubierto en la investigación, el denominado KGB. Porque además el caso puede tener derivada política, ya que se advierte literalmente de una "guerra fría" dentro del cuerpo "entre dos grupos definidos por su afinidad" con los Gobiernos del PSOE y del PP. Y se advierte también que además de los 43 investigados actuales no se descartan más con lo que surja de los dispositivos que quedan por analizar y que están dentro de las piezas separadas abiertas y en dependencias policiales en Madrid para su volcado. "Podrían vislumbrar la existencia de otro grupo dentro del Cuerpo de Policía Local que también realiza amaños en las oposiciones", recoge la jueza en su último auto del 5 de noviembre.

Hay elementos de la investigación que llevan a argumentar esta teoría. Uno es el pendrive aportado por el Ayuntamiento a la Fiscalía y ésta al juzgado el 10 de febrero, justo después de que empezaran a salir los audios en prensa nacional donde se escuchaba al entonces jefe de la Policía, Jiménez Avilés, hablar de amaños. Este dispositivo contenía la denuncia de un subinspector, que está entre los investigados por presuntamente pertenecer al grupo de Avilés, sobre "mala praxis y amaño" en un proceso de selección "por parte del jefe de la Policía Local" en tiempos del PSOE, refiriéndose a José Antonio Moreno, que no sale nombrado en las conversaciones y de ahí la teoría policial de que lo que buscaba esta grabación y este grupo era tener información para perjudicarlo dentro de esa guerra interna y política.

En el audio no sale el nombre del exjefe policial pero entre los tres agentes refieren un posible amaño en el proceso selectivo de la categoría de subinspector en 2022. Este audio, de 11 minutos y 48 segundos, lo graba uno de los tres agentes en la Huerta de Rasillo para "obtener pruebas de amaño" y "utilizarlo por el grupo criminal" liderado por Avilés. El audio se grabó en agosto de 2023 y se denunció el 10 de febrero de 2025 (cuatro días después de que la jueza decretara el secreto de las actuaciones), por lo que se considera que se grabó no para denunciar este hecho como correspondería, motivo por el que se les imputa dejación de funciones, sino "para tener información relevante con intereses delictivos para el grupo criminal liderado por Avilés y conseguir la connivencia o participación en los amaños" de uno de los agentes, que es el nexo de unión de las dos convocatorias, la de 2019 y la de 2022, y del que no se fiaba el grupo de Avilés porque previamente había denunciado irregularidades en un proceso en el que quedó fuera, por lo que buscaban también tener información para "silenciarlo con amenazas y extorsión de hacerlo público", teniéndolo así "controlado" para garantizarse su participación en futuros amaños.

El "cambiazo" del examen con "cara dura" y chistes

En este punto, la jueza va a más y habla directamente de una "guerra fría" dentro del cuerpo entre dos grupos definidos por su afinidad con los gobiernos de PSOE y del PP, por lo que con la entrega de este audio, que se habría grabado siguiendo instrucciones de Avilés, se buscaba poner bajo sospecha al anterior jefe, considerándose su entrega, por las fechas, "una reacción al audio publicado en The Objective para hacer ver amaños en otros tiempos", una forma de "contrarrestar" esa información que se estaba haciendo pública y afectaba a Avilés y otros agentes, ya que se hablaba del ascenso de un agente en tiempos socialistas al que "hicieron subinspector" y asegurando además que a su hijo, también policía, "se dio el cambiazo" durante la corrección de la prueba.

Un agente que está entre los opositores presuntamente beneficiados e investigados dentro de la prueba de 2022 por insertar contenido en su examen de la prueba práctica que habría elevado su nota final. "Lo hicieron subinspector, metieron a sus hijos, que yo no sé si tú no sabes que a su hijo le dieron el cambiazo en el tribunal, en el supuesto práctico, que aparte que llevaba las preguntas...". Incluso se relata cómo se hizo: en una sesión de corrección uno de los agentes, miembro del tribunal, asegura que otro de los miembros, que sería afín a la anterior cúpula, "empezó con los chistes e hizo un movimiento muy rápido, y yo me quede así mirando, y jajajaja, jijijiji, jojojojo", asegurando el agente que se hizo "con mucha cara dura y contando chistes". ¿Y por qué teniendo las preguntas se hizo el cambiazo? "Porque el supuesto lo tuvieron que cambiar el día de antes por filtración del supuesto práctico", llegando a decir otro agente que "se les fue de las manos, que tenía el supuesto todo Granada", hablando ahí también de la implicación también de las academias de formación.

La UDEF considera tras esta conversación que el amaño en las oposiciones de ingreso es "algo normal", pues ninguno de los tres subinspectores que hablan manifiesta el carácter delictivo de los hechos y la intención de denunciarlos, por eso concluye que "la grabación de audio estaría hecha no con intención de denunciar el hecho delictivo sino como información a utilizar por el grupo criminal" al que pertenecía el agente que grabó la conversación y del que uno de sus cabecillas era Avilés. Y el hecho de que el denunciante apunte a Moreno "cuando a este no se le menciona en ningún momento en el audio", refuerza la teoría de la UDEF de esa intencionalidad del audio tras los documentos publicados en prensa entre enero y febrero con grabaciones a Avilés, grabaciones todas que formarían parte de esta "guerra fría". Una "acción-reacción" al publicarse primero audios denunciando amaños por parte de Avilés y otros agentes y después la reacción de la entrega del audio que presuntamente trata de exponer también amaños en tiempos en los que Avilés no era jefe.

Con esta información, la investigación inicial que era sobre el proceso selectivo de 40 plazas de 2019, tras la entrega de este pendrive y sus revelaciones y la denuncia del Ayuntamiento de Granada, en junio la jueza amplió el objetivo de la investigación a los procesos selectivos para 32 plazas de 2022. Las primeras eran del tiempo del bipartito PP-Cs y las segundas del PSOE. Y a raíz de ahí se aumentó en siete personas los investigados: los tres agentes de la grabación (por su dejación del deber de denunciar delitos y su presunta participación en el grupo criminal), otros tres agentes miembros del tribunal de 2022 y que serían del bando contrario al grupo de Avilés y el psicólogo.

En el último oficio de la Policía Nacional del 4 de noviembre, en el que detalla el listado de las personas sobre las que existen indicios de criminalidad tanto en los dos procesos selectivos de Granada como en el de Algarinejo, se indica que se está volcando la información de los dispositivos digitales intervenidos a dos miembros del tribunal, subinspectores, para obtener información sobre los opositores favorecidos en las oposiciones de 32 plazas de 2022 y su lazo de unión con funcionarios de la Policía Local. Y otro aviso político: tras el análisis del móvil intervenido a un agente se localizó un chat con la actual concejala de Protección Ciudadana, Ana Agudo, "en el que existen varias conversaciones quedando acreditado sin género de duda alguna que los intervinientes eran plenamente conscientes del amaño en el proceso de acceso a 32 plazas a Policía Local de nuevo ingreso", el de 2022.

Según el oficio de la UDEF, hablan "directamente de los amaños con nombres y apellidos y sus relaciones con miembros de la Policía Local de Granada, así como recopilan datos de los presuntos beneficiados", datos que no han sido entregados a la autoridad judicial para su investigación "sino que más bien obedece a la necesidad de tener un comodín frente a futuras denuncias que les puedan perjudicar a ellos mismos". Así, la UDEF redunda también en los dos bandos en el cuerpo y mantiene que "dichas fuerzas políticas y sus mandos aprovechan su permanencia para amañar todos los procedimientos de acceso y ascenso".

Lo que queda es conocer el resultado del volcado de los dispositivos del agente nexo de las dos convocatorias al estar en los tribunales de las de 2019 y 2022 y haber grabado conversaciones para utilizarlas en su favor personal y profesional tras ser perjudicado al inicio en su prueba pero después entrar supuestamente en la trama y ser parte del grupo criminal, según recoge la UDEF. Grabaciones que realizaba con su móvil y con un bolígrafo grabador. También la información de otro subinspector, cuyo teléfono móvil también evidencia "dos grupos criminales, dos grandes bandos, en el Cuerpo de la Policía Local". De hecho, de los primeros audios encontrados en el móvil de este subinspector se desprendieron los nuevos registros de la UDEF tanto en el Rasillo en verano para recopilar información sobre el proceso de 2022 como en octubre a la vivienda particular del agente y un despacho.