Dos niños y seis jóvenes de entre 15 y 29 años se han infectado de coronavirus durante las últimas dos semanas en Granada. Es un tercio de todos los casos nuevos confirmados en este período (24) y llama la atención porque la tasa de contagio a esas edades tempranas se ha elevado mucho respecto al resto de tiempo de pandemia, cuando el virus se cebó sobre todo en personas de mayor edad.

De esos 24 nuevos casos de las últimas dos semanas (hasta el 5 de junio), además de los 8 más jóvenes ya citados, seis personas tienen entre 30 y 44 años y otras seis entre 45 y 64 años. Sólo hay 3 positivos confirmados con edades entre 65 y 84 años y una única persona con más de 85 años. Es decir, que la mitad de todos los que se han contagiado en estos últimos días no alcanzan los 44 años y apenas hay ancianos entre los nuevos afectados. 

Estas cifras se traducen en unas tasas de contagio por población de ese rango de edad que se han invertido respecto a todo el tiempo de la pandemia. Es conocido que los más afectados han sido los más mayores y, en efecto, la tasa en Granada es de 1.374 contagiados por cada 100.000 habitantes de más de 85 años. La misma tasa en niños (de 0 a 14 años) era de 11 casos y en jóvenes (de 15 a 29 años) de 140. Hasta los 44 años, la tasa por población era de 293; y a partir de esa franja de edad las tasas se disparan por encima de 500 casos hasta la más alta que corresponde a los más ancianos.

Pero ésas son las cifras y tasas globales de toda la pandemia y no se corresponden con la proporción de casos surgidos en los últimos días. Sólo en ese periodo de 14 días, la población con mayor tasa de incidencia ha sido la de 15 a 29 años por culpa de esos 6 nuevos infectados. Con 3,9 casos por centenar de miles de habitantes, supera la media de ese período, que es de 2,6. Le sigue la población de entre 30 a 44 años, con una incidencia de 3. En los niños sigue siendo baja (1,5) pero es ya la mitad de la media global, lo que supera con mucho a la situación global de toda la pandemia, cuando la media de incidencia en Granada multiplicaba por 32 a la tasa infantil.

Los datos sobre la incidencia del virus en las últimas semanas se tienen muy en cuenta para valorar la evolución de la epidemia y la incidencia de las medidas adoptadas en la desescalada. En Granada, las bajas cifras globales de nuevos contagios demuestran que la recuperación de ciertas libertadas no ha dado lugar a un aumento de contagios. Pero estos datos sobre las franjas de edad sí trasladan alguna conclusión sobre la mayor incidencia ahora en jóvenes frente a los mayores.

Los niños fueron los primeros en comenzar a salir a la calle a finales de abril, además de las personas en edad de trabajar. Las medidas de desconfinamiento que han llegado con la fase 1 y la fase 2 de la desescalada se han traducido en un aumento de reuniones familiares y de amigos, además de la apertura de bares y comercios. La Policía ha tenido que controlar e intervenir en varios encuentros entre jóvenes para hacer botellón, pero también para celebraciones familiares. Los mayores, igual que las personas de mayor riesgo para su salud, han estado excluidos de las nuevas libertadas horarias y de movimiento, y sus rutinas no se han alterado tanto como las de los más jóvenes durante la pandemia.