El Ayuntamiento de Granada ha incorporado a la flota del transporte urbano de la ciudad un nuevo autobús cien por cien eléctrico, con cero emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera, más silencioso y cómodo, que se suma al que entró en funcionamiento al inicio de 2022.

Con esta nueva incorporación, la institución local se acerca el cumplimiento de las previsiones municipales de finalizar el año con ocho vehículos nuevos, de los que seis se prevé adquirir antes del mes de diciembre (cuatro eléctricos y dos híbridos).

En la actualidad, la flota del servicio de transporte público de Granada, gestionado por el operador Alsa, está compuesta por 191 autobuses, de los que 32 son híbridos y dos cien por cien eléctricos.

Así lo ha destacado esta mañana el alcalde de Granada, Francisco Cuenca, quien durante la presentación del nuevo vehículo ha subrayado que Granada da "un paso de gigante y sin retorno, en la implantación de un nuevo modelo de transporte público más amable, cómodo, seguro y, sobre todo, respetuoso con el medio ambiente"

Cuenca ha añadido que "sin lugar a dudas estamos ante un logro que va a ser posible gracias a la apuesta del gobierno municipal de trabajar por mejorar la calidad de los servicios municipales, un elemento indispensable para hacer de Granada una ciudad más amable, cómoda y respetuosa con el medio ambiente".

Fruto de ese compromiso, según sus palabras, es el proyecto 'Granada respira' dentro del que se enmarca las iniciativas municipales dirigidas a abordar la "electromoviliad" de la flota actual de autobuses, gracias a la que el equipo de gobierno se ha propuesto como objetivo "reducir en un 30% las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera y, por lo tanto, conseguir una Granada más amable y con mayor calidad de vida", ha puntualizado el regidor.

Acompañado por la concejal de Movilidad y Protección Ciudadana, Raquel Ruz, y el director de Zona Mediterránea de Alsa, Valeriano Díaz, el máximo responsable municipal ha indicado que el nuevo vehículo, que ya ha estado en pruebas durante unos meses y que ha contado con una inversión de "aproximadamente 500.000 euros", se sumará al servicio prestado por el bus eléctrico que se incorporó en enero de 2022 y que, desde su entrada en funcionamiento, "ha sido utilizado en diversas líneas, como la 9, 11, N1, N3, S2, U1 y U2, entre otras".

En este sentido, Cuenca ha destacado la "alta autonomía" de los nuevos vehículos, de 550 kilómetros con una sola carga de la batería, que se ven incrementados gracias a que en cada frenada recupera energía, por lo que ha destacado que "podrán realizar tanto el servicio de la mañana como algunos servicios de tarde".

Así es el nuevo vehículo municipal

El nuevo vehículo, de la marca Man, además cuenta con concepto de carga inteligente que permite planificar los momentos de cara con la máxima rentabilidad de tiempo y energía, según palabras de Valeriano Díaz, quien, no obstante, ha reconocido que "se está trabajando para que tengan mayor autonomía y podamos abordar cuanto antes que realicen servicios con trayectos largos mediante la instalación de puntos de carga rápida en la ciudad", aspecto que Francisco Cuenca se ha comprometido a abordar "cuanto antes a través de los fondos europeos de recuperación, transformación y resiliencia Next Generation.

Especial atención ha prestado al "confort y comodidad" del nuevo vehículo, que garantiza una circulación más estable y silenciosa, dado que los motores eléctricos reducen al máximo la contaminación acústica, a la vez que es más espacioso y acogedor para los pasajeros que dispondrán de más asientos y de una ergonomía inteligente, "acorde con la imagen de una ciudad moderna".

Transportes Rober desplazó en 2019 a un total de 26.247.427 de pasajeros durante todo el año, de los que en el período enero a mayo fueron 11.384.957 usuarios frente a los 8.784.484, lo que representa un 77,16% del total de usuarios que transportaron.

Según el Ayuntamiento, el servicio municiapl de transportes aún no ha llegado a las cifras de 2019, pero han asegurado que "trabajamos día a día de, no solo alcanzarlo, sino superarlo, ya que es responsabilidad de todos hacer más uso del Transporte Público frente al coche privado, consiguiendo así una ciudad más limpia y menos contaminante, donde el peatón gane protagonismo al tráfico.