Los primeros cien días del rector Pedro Mercado: A punto para el maratón normativo

El rector de la Universidad de Granada, Pedro Mercado, cumple este 22 de septiembre los primeros cien días de mandato al frente de la institución granadina, un periodo simbólico que por su brevedad apenas permite materializar decisiones. Sin embargo, permite medir gestos y también el análisis. El catedrático de Filosofía del Derecho ganó en las elecciones celebradas el pasado 16 de mayo y el 15 de junio el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) hizo público su nombramiento como rector, cargo que mantendrá durante un único mandato de seis años.

En estos primeros cien días la actividad ha sido intensa y, tal y como anunció durante la campaña, una de las primeras cuestiones a abordar ha sido "renovar" el compromiso que el rectorado tiene con su entorno. En esta propuesta se pueden enmarcar los encuentros entre el máximo responsable de la institución con la alcaldesa de Granada, Marifrán Carazo, el presidente de la Diputación, Francisco Rodríguez. Con ambos ha podido hablar de los proyectos más destacados en los que trabaja la Universidad y puso a disposición de las dos instituciones tanto el trabajo como la experiencia de la propia UGR. También se ha fijado la relación con el consejero José Carlos Gómez Villamandos, presente tanto en la toma de posesión como en el acto de apertura del curso universitario.

La Universidad de Granada cuenta con un engranaje que no se ha detenido en este traspaso de poderes entre la anterior rectora, Pilar Aranda, y Mercado. Ejemplo de esto fue el acto de presentación del proyecto de la Azucarera de San Isidro, apenas dos días después de las elecciones al Rectorado, y en el que tomaron la palabra tanto la rectora como su sucesor. Allí, en la nave central de uno de los edificios del complejo, estaban representantes de todas las instituciones granadinas.

En estos casi cien días ha habido jornadas señaladas. El 7 de julio presentó la composición de su equipo de gobierno, conformado con doce vicerrectorados, seis hombres y seis mujeres. Se recuperó el vicerrectorado de Infraestructuras y Sostenibilidad, en manos de Montserrat Zamorano; se creó el de Transformación Digital, liderado por Gabriel Maciá, y el de Calidad, Innovación Docente y Estudios de Grado, asumido por Ana María Rivas. Asimismo, se añadió la Delegación del Rector para la Salud y las Relaciones con el Sistema Sanitario, asumido por José Juan Jiménez Moleón, y se mantuvieron algunos de los elementos clave en el mandato de Aranda, como la apuesta por Enrique Herrera como responsable de Investigación y Transferencia.El 20 de julio Mercado presidió su primer consejo de gobierno. Se aprobó entonces la nueva estructura del gobierno de la UGR, el equipo de 120 personas que debe tejer el modelo de Universidad de estos años, al menos hasta las próximas elecciones, dentro de seis años.

Durante la presentación del equipo de vicerrectores se ofrecieron dos claves de cómo será el mandato de Mercado. La primera es casi una obviedad, pero tiene su cosa. Durará seis años. Antes eran cuatro años con posibilidad de prórroga. Esto obliga a acelerar las acciones de gobierno para cumplir los objetivos. La segunda es que "uno de los grandes desafíos" de estos años será la adaptación de la nueva Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU), proceso que supondrá un auténtico maratón normativo. Todo, incluidos, los estatutos, deberá adaptarse a la Ley. Esta cuestión también figuró en el discurso que pronunció Mercado en el acto de apertura del curso académico. Se tiene que abordar una reforma estatutaria "para la que la cuenta atrás ya está en marcha", dijo el rector. En esa reforma la UGR asumirá "nuevas funciones, competencias y estructuras".

El tiempo apremia -"los plazos son breves, quizá demasiado", dijo Mercado ante el consejero de Universidad, Gómez Villamandos, en el acto de inicio del año académico- y otra de los melones que deberá abrirse es el cambio en la oferta formativa. Se prevé un mapa de titulaciones "flexible", anunció Mercado, que asumió que "debemos trabajar en la reorganización" de los grados. El Decreto de Ordenación de las Enseñanzas Universitarias de la Junta es el documento que obligará al sistema andaluz de educación superior a ponerse ante el espejo y determinar qué y cómo se va a enseñar. Virtualización y empleabilidad son dos de los elementos de esta reorganización.

Estas cuestiones son inmediatas y se hablará de ellas, a buen seguro, en los próximos meses. En estos cien primeros días ya se ha trazado la senda. Y también se han hecho avances. Quizá el más significativo, por lo complejo y largo que ha resultado llegar a este punto, es el acuerdo alcanzado el pasado 26 de julio entre los rectores de las universidades públicas andaluzas para asentir el nuevo modelo de financiación, ya aprobado en Consejo de Gobierno de la Junta. El reparto del dinero entre las universidades, la manera de ejecutar esa distribución, lleva años de gestación.

Con los sindicatos ya se ha iniciado en estos cien primeros días de mandado el diseño de una agenda "estable" de negociación. En esos encuentros que ahora se diseñan se abordará la regulación del teletrabajo o nuevas fórmulas horarias, como la semana de cuatro días de trabajo, una iniciativa que el Rectorado prevé explorar.

En Gerencia ya se han iniciado los trabajos para preparar un plan que permita mejorar precisamente la gestión económica y financiera. También se han establecido las mimbres de los próximos presupuestos, los primeros de Mercado como rector, que se tramitarán en el mes de diciembre.

También se trabaja en el nuevo mapa departamental, una cuestión que se prevé clave para la planificación de los próximos años y se ha iniciado la tarea de preparar el plan de infraestructuras. Este curso se iniciarán las obras de la piscina de Fuentenueva y ya se preparan los pliegos de licitación de obras que ya estaban en preparadas. En este periodo de gracia se aborda la recogida de información para establecer un diagnóstico de necesidades.

En junio, cuando se cumpla un año de mandato, se podrá calibrar la toma de decisiones por parte de Mercado y su equipo y de forma más precisa. Para entonces, parte de los proyectos aquí esbozados comenzarán a sustanciarse, el edificio UGR Dones se habrá estrenado, habrá posiblemente cambios en los comedores universitarios y Fuentenueva contará de nuevo con piscina olímpica. Se abordará la cuestión del alojamiento estudiantil y se colocarán los primeros ladrillos del inicio de las celebraciones del quinto centenario de la UGR en 2026 que culminarán en 2031.