Las obras compensatorias del eje Arabial-Palencia en la capital avanzan a buen ritmo, y han permitido la actualización y mejora de luminarias, asfalto, aceras, así como de lo que no se ve, es decir, infraestructuras por debajo del suelo que necesitaban una reforma.

Dentro de la coordinación que se ha instaurado para la reforma de esta zona de Granada, el Ayuntamiento de Granada y la empresa municipal de aguas, Emasagra, han invertido 751.000 euros en cambiar las infraestructuras hidráulicas para su renovación.

Con estas obras se ha cambiado y actualizado la toma de agua y la red de saneamiento de todo el tramo que va desde el río Genil hasta el parque Fernández Piñar, recorriendo toda la calle Arabial. Se incorporan además sistemas tecnológicos para controlar caudales y hacer seguimiento en tiempo real del ciclo integral del agua.

El alcalde de Granada, Francisco Cuenca, ha destacado que en estas obras "se han incorporado sistemas modernos de control del agua, que permiten seguir el caudal y permite mejorar nuestras redes hídricas en un tiempo en el que tenemos cierta alerta ante una situación de sequía".

"Esta intervención se ha dividido en tres tramos, que no solo ha permitido renovar la infraestructura, sino también eliminar el fibrocemento, una infraestructura antigua que se tiene que ir reduciendo progresivamente por normativa ambiental y que se deterioraba mucho con el tiempo", ha señalado Cuenca.

Por su parte, el delegado de Fomento de la Junta en Granada, Antonio Ayllón, ha asegurado que las obras del último tramo de la obra del eje Arabial-Palencia avanzan en el calendario previsto y estarán acabadas a finales de marzo, como ya anunció la consejera Marifrán Carazo. 

"Emasagra y el Ayuntamiento de Granada han hecho su labor perfectamente y la Junta de Andalucía ahora ya está remantando esta obra, que avanza bien. Toquemos madera y esperemos que el tiempo nos acompañe para reasfaltar rápidamente y acabar antes de que acabe marzo esta calle", ha asegurado.

Ayllón y Cuenca han destacado el esfuerzo de la Junta por reformar estas calles, incluidas dentro de las obras compensatorias del Metro de Granada, y la modernización de las mismas, con la sustitución de luminarias, el cambio del asfalto, la instalación de nuevo mobiliario urbano y la sustitución y duplicación de la masa arbórea ya existente, con la plantación de más de 350 árboles de baja carga alérgica.