El bono turístico se consolida para conocer la Granada que va más allá de la Alhambra

Si julio ha sido bueno para el turismo granadino, agosto va a ser todavía mejor. El alcalde en funciones y concejal de Cultura y Deporte de Granada, Juan García Montero, pronosticó ayer, a una semana de que finalice agosto, que la ciudad volverá a batir récords turísticos en este octavo mes del año, que Granada conseguirá cifras todavía más "sensacionales" que las de un mes de julio que ya ha pasado a la historia.

El aluvión de viajeros que ha recibido Granada este verano se ha dejado notar en los hoteles, en bares y restaurantes, en las calles y, por supuesto, en los principales atractivos culturales y monumentales de la ciudad. De hecho, García Montero indicó ayer que las cifras de venta del bono turístico (Granada Card) se han disparado durante el mes de julio, lo que demuestra que Granada estaba a rebosar en julio y que cada vez son más los turistas que optan por una modalidad de viaje que les permite conocer la ciudad más allá de la Alhambra.

García Montero reveló que estas tarjetas turísticas, que suelen solucionarles la vida a muchos viajeros, han registrado un incremento espectacular en este último mes de julio. Un total de 28.772 visitantes han optado por el bono turístico, lo que supone un crecimiento de las ventas del 71,5% respecto al mismo periodo del año anterior. Esta cifra fue calificada por el concejal como "sensacional" para todos los granadinos, ya que repercutirá en la economía de toda la ciudad.

La oferta turística y cultural de Granada es inabarcable y cuando se organiza un viaje a una ciudad de este tipo, resulta clave que los viajeros visiten todos los espacios culturales que puedan en el menor tiempo posible, para que resulte un viaje provechoso. En cambio, la mala gestión de las visitas puede desembocar en un desastre para algunos viajeros, donde la falta de información o de organización pueden hacer que la visita les cueste mucho más cara de lo que hubiesen planeado. Así, una alternativa para solventar todos estos problemas es la tarjeta turística, que permite acceder a los principales monumentos granadinos, al servicio de transporte público y ofrece descuentos en otros servicios turísticos. Además, es una opción ideal para familias ya que también hay descuentos para los más pequeños, con edades desde los 3 hasta los 11 años. No hay que olvidar que una vez que se cuenta con el bono, no hay que sacar ninguna entrada más, lo que supone un ahorro de hasta el 30% en comparación con las entradas individuales.

De esta manera, el bono se consolida como la vía más fácil para acceder a las principales joyas de la ciudad, como la Alhambra, la Catedral, la Capilla Real, el Monasterio de San Jerónimo, el Monasterio de Cartuja, el Parque de las Ciencias y el Museo CajaGranada.