La Universidad de Granada ha emprendido un proceso de reflexión para decidir si aplicar definitivamente el curso próximo el adelanto del calendario académico. Para ello ha preparado una serie de documentos y ejemplos de otras instituciones educativas españolas, entre los que se encuentra una estadística de rendimiento académico. Los porcentajes más elevados en todas las ramas de conocimiento corresponden a universidades que ya han emprendido ese cambio de calendario, como la Autónoma de Madrid o las más importantes de Cataluña.

Estas universidades han mejorado mucho su rendimiento en los últimos años, con tasas en las diferentes áreas de entre el 80 y 90%. Esto es el porcentaje de asignaturas que aprueban sus alumnos, respecto a las materias en las que se han matriculado. Cinco años antes, en el curso 2010-11, esas tasas de rendimiento rara vez pasaban del 70%.

Este proceso de mejora es generalizado, tanto en las instituciones con cambio de calendario como en las que aún no lo han emprendido, pero la diferencia, es que los mejores resultados actuales aparecen en el haber de universidades como la Autónoma de Madrid, cuyo rendimiento es del 84% en Ciencias, del 89 en Ciencias Sociales, del 84% en Artes y Humanidades y del 93% en Salud.

La Complutense es otra de las universidades escogidas en esta lista, aunque aún no ha eliminado los exámenes de septiembre. Sus tasas de rendimiento se encuentran entre las más bajas de la selección realizada.

No obstante, hay excepciones, pues la Universidad de Santiago de Compostela, que ya tiene calendario adelantado, aparece en la cola de la lista escogida por sus bajas tasas de rendimiento académico.

La adaptación a la normalidad europea, total o parcialmente, ya ha sido asumida por un grupo elevado de universidades españolas y la de Granada ha expuesto en su web todos estos casos como ejemplos a tener en cuenta.

La UGR ha emprendido este curso un proceso transitorio y de reflexión para una posible aplicación del cambio en el curso 2017-18. Ya ha comenzado la hoja de ruta prevista con reuniones de representantes del equipo de gobierno con los centros (facultades y escuelas), para aportarles la documentación preparada y pedirles un documento en el que expongan las particularidades que la aplicación de esta idea pueda tener en su ámbito. Estos documentos tendrán que ser remitidos al Vicerrectorado de Docencia en enero de 2017, para que los órganos de gobierno los analicen posteriormente, teniendo en cuenta los pros y los contras expuestos.

También ahora se ha iniciado un proceso de recogida de opiniones y sugerencias entre toda la comunidad universitaria. En la página web del Vicerrectorado hay un cuestionario a rellenar para remitir esas ideas, que pueden venir de profesores, alumnos y del personal de administración y servicios.

La Universidad también ha expuesto tres propuestas de adelanto de calendario, una de la Facultad de Económicas y Empresariales, de la Escuela de Ingeniería e Informática y la propia UGR. Este último plantea comenzar el curso en la primera quincena de septiembre, de modo que se pueda adelantar todo el período lectivo y comenzar los exámenes ordinarios del segundo cuatrimestre en mayo. Esto permitiría dejar un periodo de tres semanas libres en junio para realizar todos los exámenes extraordinarios (los que se han hecho siempre en septiembre) en del 2 al 20 de julio.

Con esta propuesta desaparecerían los exámenes de septiembre (que pasan a julio) y los estudiantes que no acudan a esta convocatoria podría terminar el curso a primeros de junio.