No hay dolor. Es la expresión que más o menos manifestarán los once jugadores del Granada CF que saltarán al césped del GSP Stadium de Nicosia, y los que estarán en el banquillo, también. El objetivo, sumar tres puntos ante el Omonia que pueden ser vitales de cara al pase a los dieciseisavos de final de la Liga Europa.

El Granada jugará en Nicosia sin Diego Martínez

Si el lunes fue Jesús Vallejo el que se unió al cuadro bajas al dar positivo por coronavirus en el PCR al que se sometió toda la plantilla rojiblanca, este martes el 'cañonazo' dio de lleno en el timón de la nave rojiblanca. El entrenador y gran protagonista de este histórico Granada, Diego Martínez, se tuvo que quedar en tierra al dar positivo en el test de antígenos del Covid-19. Aunque desde el club se explicó que la prueba "no es concluyente", la precaución lógica hizo que el técnico no viajara a Chipre con el resto de la expedición. Por el contrario, el que sí viajó fue Dimitri Foulquier, ya recuperado de su lesión muscular y cuya presencia supone un alivio.

A pesar de todos los pesares, la diferencia de potencial de ambos contendientes hace que el conjunto rojiblanco sea favorito sobre el papel ante un conjunto al que no se le puede menospreciar porque fue capaz de sacar un punto en su visita al PAOK de Salónica y que hace una semana cayó en su campo ante el PSV, que marcó el gol de la victoria en los últimos compases del encuentro.

Los rojiblancos, en un buen  momento

Por lo tanto, el Granada tendrá que demostrar sobre el terreno de juego que, tras dos jornadas, es el líder del Grupo E tras ganar al PSV Eindhoven (1-2) y empatar la pasada semana frente al PAOK (0-0). Una victoria ante el Omonia allanaría mucho el pase hacia la fase de eliminatorias del segundo torneo continental, más aún cuando el próximo compromiso será en el Nuevo Los Cármenes también ante los chipriotas, que ocupan la última plaza del grupo.

Foulquier al final viajó a Chipre

El conjunto granadinista se presenta en la capital chipriota en un buen momento, pues además de haber comenzado con buen pie su participación en la Liga Europa, anda con paso firme en la competición liguera de Primera División. Por el contrario, el equipo de Diego Martínez acumula muchos minutos desde el inicio de la temporada, lo que conlleva el lógico cansancio que se intentará amortiguar con las lógicas rotaciones y la demostrada capacidad de recuperación de los futbolistas.

El gran contratiempo en el Granada lleva el nombre del coronavirus. El equipo tendrá que jugar en Nicosia 'huérfano', pues Diego Martínez no podrá dirigir a sus hombres desde el banquillo, aunque sus órdenes llegarán sin duda para ser retransmitidas a los futbolistas por su ayudante técnico, Jesús Roche, y el preparador físico Víctor Lafuente. Pero no es lo mismo. Tampoco ha viajado por idéntico motivo tres miembros del cuerpo técnico, ademas de Jesús Vallejo, que dio positivo el pasado lunes, y Roberto Soldado, que está a punto de cumplir el obligado confinamiento.

El lateral derecho

A las bajas por Covid-19 hay que añadir a los lesionados Ramon Azeez y Quini, que aún no se han recuperado de sus problemas musculares. En cambio, Foulquier sí ha podido viajar a Chipre tras superar la lesión fibrilar que padecía en el isquiosural derecho, aunque está por ver si será o no titular tras perderse los dos últimos partidos.

Precisamente, una de las dudas de cara a la formación del once de salida estará en si el lateral galo será titular o si su puesto lo ocupará Antonio Puertas, tal como ocurrió en el enfrentamiento de hace una semana ante el PAOK, o incluso algún central que tendría que reconvertirse, tal como hizo Vallejo el pasado domingo.

En cuanto al resto, se mantendrán las rotaciones y lo más probable es que regresen a la titularidad jugadores que fueron suplentes ante el Levante como Yangel Herrera y Robert Kenedy.

El rival

El Omonia, por su parte, espera al Granada obligado a lograr un buen resultado que le permita mantenerse con vida en el grupo. El cuadro chipriota estuvo a punto de meterse en la fase de grupos de la Liga de Campeones, aunque cayó en la eliminatoria final ante el Olympiacos griego (cayó por 2-0 en la ida y empató sin goles en la vuelta) tras eliminar en las tres previas anteriores al Arabat armenio (0-1), el Legia Varsovia polaco (0-2) y el Estrella Roja serbio (penaltis tras 1-1).

El Omonia cayó el pasado jueves ante el PSV, que marcó en el último suspiro.

La formación que dirige el noruego Henning Berg, que lideraba la liga de su país cuando se dio por finalizada la pasada campaña por el coronavirus, cuenta en sus filas con el centrocampista español Jordi Gómez, que es uno de sus jugadores más importantes. El Omonia, que como el Granada es debutante en la Liga Europa, es un conjunto que se crece en estadio, ya que llevaba antes de la derrota del pasado jueves frente al PSV siete partidos sin perder como local en competición continental.

Por lo tanto, españoles y chipriotas buscarán el triunfo para dar un paso de gigante hacia la siguiente fase de la Liga Europa, los rojiblancos, y mantener sus opciones, el cuadro local.