El entrenador del Granada CF, Diego Martínez, dijo tras remontar ante el Valladolid para acabar ganando por 2-1 que el público les dio "fuerzas cuando ya no había" y que nunca se rinden más allá de que estén "peor o mejor" porque saben que van a tener "opciones hasta el final".

"Venimos de un esfuerzo grandísimo físico y mental el miércoles en Copa, la clave es que somos un equipo en mayúscula y creemos en lo que hacemos", añadió el entrenador del Granada."Hemos sacado el partido más con el corazón que con la cabeza, ha sido por deseo y determinación", agregó el técnico, quien vio un encuentro "muy difícil" para los suyos y con "alternativas y opciones para los dos equipos".

Diego reconoció que el gol en contra, que calificó como "raro", les desestabilizó y que hasta ese momento no pudieron jugar "al ritmo" que les hubiese gustado.

"Es difícil meter ritmo tras jugar entre semana. El peor momento han sido nuestras pérdidas de balón, nos pudieron hacer daño en alguna, sobre todo tras el 0-1", indicó el entrenador, quien no olvidó que "en el balón parado" tuvieron "mucho peligro" y que contaron con buenas ocasiones en el primer tiempo.

Sobre el papel en el choque de Fede Vico, que llevaba dos meses y medio sin jugar, apuntó que fue "muy importante y clave para conseguir la victoria".

"Durante la semana me decía que tenía buenas sensaciones. Tuvo mucha personalidad. Me alegro mucho por él porque lo ha pasado mal", añadió sobre Vico.

El entrenador del Valladolid, Sergio González, asegura que el balón le da en el brazo a Antonio Puertas en el gol del empate

Sobre el 1-1 y una posible mano de Antonio Puertas en el remate, explicó que "se ve perfectamente en la tele" que no hay mano y que el VAR "hace el fútbol más justo", discurso que mantenido cuando le ha perjudicado o beneficiado.

El entrenador del Valladolid, Sergio González, se quejó del árbitro por la acción del 1-1. "Hemos marcado y después no ha pasado nada hasta que el árbitro ha querido que pase. Le da en la mano claramente, no hay duda", señaló.