Al margen de los resultados que está cosechando el Granada CF en este arranque liguero que no satisface a nadie, y a un modelo de juego que aún está por definir, si por algo debe estar preocupado Robert Moreno es por los problemas que está teniendo su equipo para generar ocasiones de gol. El técnico de Hospitalet viene repitiendo en sus ruedas de prensa que el objetivo debe ser reducir el número de oportunidades que les generan los rivales y que sus jugadores hagan más daño en ataque.

Sin embargo, ni una ni otra cosa está logrando. En el fútbol, al igual que en otros deportes como el baloncesto, los números en ocasiones dicen poco pero en otras reflejan en gran medida el rendimiento de un conjunto. Y en esta ocasión, las sensaciones que muestran los rojiblancos en la fase ofensiva se corresponden con unos guarismos muy pobres que le han llevado a rozar los puestos de descenso tras la disputa de las cuatro primeras jornadas.

A la contra

Cuatro citas en las que la forma de llegar al área contraria se ha basado en tratar de sorprender al rival de turno al contraataque. En pocas ocasiones se ha generado peligro a base de dominar las posesión, que sería el sueño del cuerpo técnico. Todo lo contrario. Al Granada CF le cuesta mucho someter al rival a base de circulación de balón, pese a que quiere iniciar el juego desde atrás y evitar los pelotazos. Pero los técnicos rivales ya conocen la propuesta del entrenador rojiblanco y presionan muy arriba, lo que está provocando que no salgan con la claridad que Robert quisiera.

El delantero Luis Suárez está siendo el hombre más incisivo

En cuatro partidos, el cuadro nazarí ha intentado el disparo a portería en 35 ocasiones, el decimocuarto de LaLiga Santander, con una media de 8,75 por duelo. Más de la mitad se han intentado desde fuera del área (18) por un total de 17 en el interior del área. Pero lo realmente importante en este apartado es que los intentos vayan entre los tres palos y ahí el rendimiento es muy pobre.

Es evidente que la preocupación del cuerpo técnico del Granada CF existe.

Tan sólo ocho disparos han ido entre los palos de Rulli, Mamardashvili, Dimitrievski y Rui Silva, que han sido los porteros que han tenido enfrente los jugadores rojiblancos en este inicio de competición. Únicamente el Celta de Vigo es el conjunto que menos disparos entre palos ha realizado, con tan sólo seis, de ahí que se encuentre antepenúltimo con un punto en su casillero. Por poner un ejemplo, el Real Betis lo ha intentado en 22 ocasiones de un total de 56 chuts.

El más peligroso

Pero si algo ha quedado claro, al menos hasta el momento, es que el hombre más peligroso del cuadro de Moreno es Luis Suárez. El ariete colombiano acumula un total de ocho disparos, casi el 23% de los intentos y eso no que ha estado en el terreno de juego todos los minutos. Ha sido titular en cada uno de los encuentros pero ninguno lo ha jugado en su totalidad. Es más, ante el Villarreal fue sustituido al descanso. Pero aún así, el ‘cafetero’ es la principal arma ofensiva nazarí.

Ante el Betis tan sólo cometió el Granada CF siete faltas en todo el duelo

De los cuatro remates a portería, dos fueron goles, ante Valencia y Betis, y otro se estrelló en el palo de Dimitrievski frente al Rayo Vallecano, por lo que su porcentaje de acierto cuando el cuero va al arco rival es muy alto. De sus ocho intentos, uno fue ante el Villarreal, dos ante Rayo y Valencia y tres el pasado lunes, y de todos ellos, cinco han sido desde fuera del área. Su importancia es tal que los jugadores que más se acercan de toda la plantilla en cuanto a disparos son Montoro, Machís y Monchu con cuatro, la mitad que Suárez; con tres quedan Germán y Bacca y con dos Carlos Neva y Luis Milla. Únicamente Bacca, Milla, Jorge Molina y Gonalons han chutado entre los tres palos y eso dice mucho de la capacidad ofensiva del equipo de Robert Moreno.

Sin posesión

Pero hay otros aspectos que llaman poderosamente la atención a tenor del estilo de juego que quiere emplear el ex seleccionador nacional. Por ejemplo, tan sólo ha logrado ganar la posesión en un duelo, ante el Rayo Vallecano y cuando los de Iraola ya vencían claramente. El Rayo se echó atrás en busca de mantener el resultado y pertrecharse defensivamente ante un Granada CF que estaba siendo goleado. De hecho, fue el partido en el que menos llegó al área contraria. En el resto de citas, el rival ha tenido más el balón.

Pocas faltas

Para el recuerdo del aficionado granadinista quedará en el duelo ante los de Manuel Pellegrini el tanto de Canales, arrancando desde el centro del campo sin que nadie lograra pararlo. Ni Domingos Duarte, ni Arias ni Montoro fueron capaces de frenar al cántabro para desesperación de la grada. Pero lo que más llama la atención fue que ante los béticos, los de Robert Moreno cometieron tan sólo siete faltas, una cifra bajísima para un equipo de Primera División donde el oficio en faltas tácticas, como la que tenía que haberse cometido ante la acción del ‘10’ verdiblanco, es un aspecto que refleja que el Granada CF no pasa por su mejor momento.