Si es verdad eso de que el fútbol son estados de ánimo, el de la afición rojiblanco está ahora bastante tocado. El cierre del mercado estival, con muchos problemas para dar salida a los jugadores que no contaban y la ausencia de incorporaciones con las que completar la plantilla y no dejar algunas posiciones cogidas con alfileres, han sumido a gran parte del entorno rojiblanco en el desánimo y la decepción. El límite salarial ha ahogado a los nazaríes, que se quedan con una plantilla corta en la que ni siquiera hay dos jugadores por puesto.

Corta, pero capacitada; escasa, mas capaz. Eso es al menos lo que ha demostrado en los dos primeros encuentros de la temporada, en los que ha mostrado más virtudes que carencias, más aspectos positivos que negativos. Lo peor de ese inicio de campeonato, no haber ganado aún. Eso es lo que buscará el Granada esta noche ante el Osasuna, conseguir un triunfo que haga olvidar los fantasmas del curso anterior, cuando la primera victoria llegó en la sexta jornada; que devuelva la fe a una grada pesimista, que sirva para reivindicarse a una plantilla en la que algunos no creen, que recompense al equipo por un inicio con bastantes méritos y pocos puntos.

Ese triunfo, que para el Granada pudo y debió llegar hace siete días contra el Lugo, es el que busca también esta noche en el Nuevo Los Cármenes el Osasuna, que ha iniciado el campeonato mal, con un punto tras perder en Mallorca en la primera jornada y empatar en la pasada en casa frente al Elche.

A falta de que esta misma mañana se conozca la lista definitiva de convocados, todo hace indicar que el entrenador del Granada, Diego Martínez, no podrá contar con el delantero Rodri Ríos, que no ha podido ejercitarse en toda la semana por el esguince de tobillo sufrido frente al Lugo.

Adrián Ramos lo sustituirá en un once que será parecido al de las dos primeras jornadas, con Víctor Díaz de nuevo como central pero con algunas dudas. La principal radica en la medular. Montoro ha tenido algunos problemas físicos durante la semana aunque todo hace indicar que será de la partida. El técnico tendrá que decidir su acompañante entre Fede San Emeterio, Alberto Martín y el argentino Nico Aguirre.

Algunas dudas más ofrece el estado de Fede Vico, también tocado en los últimos días. La presencia de Pozo es, al menos, un respiro para todos. El joven atacante cedido por el Sevilla no pudo debutar ante los lucenses pero ya sí ha podido ser inscrito por el Granada en LaLiga.

Serán baja una semana más el meta Aarón Escandell y el medio Fran Rico, aunque el cancerbero ya ha entrenado en los últimos días de la semana al mismo ritmo que sus compañeros tras superar una rotura fibrilar.

Para Osasuna el choque supone su reencuentro con Diego Martínez tres meses después de la salida del técnico gallego del equipo navarro.

La expulsión del central David García en el pasado encuentro abre un hueco en el equipo titular a Imanol García, repescado este verano por Osasuna, quien jugará en el medio centro, por lo que Oier Sanjurjo retrasará su posición de pivote al puesto de central.

La principal duda en el once inicial rojillo está en la portería, después de que Rubén Martínez se haya recuperado de la lesión muscular que le ha impedido jugar las dos primeras jornadas, lo que podría dejar en el banquillo al canterano Juan Pérez, tercer portero que fue titular ante el Mallorca y el Elche con buenas actuaciones. Sergio Herrera, el otro cancerbero de la plantilla, es baja de larga duración. Tampoco podrán estar en el Nuevo Los Cármenes ante el Granada por lesión el medio Fran Mérida ni el central ex rojiblanco Aridane Hernández.

Granada y Osasuna buscarán su primer triunfo del curso en un choque que comenzará a las nueve de la noche en el Nuevo Los Cármenes con arbitraje del canario Trujillo Suárez.