"Estas líneas son para darte las gracias por el libro Una nueva poesía española. Leyéndolo, he recordado aquellos días que pasamos juntos en México, y confirmado la opinión que ya te dije sobre este trabajo, que en un sentido me parece trascendental", le escribe Francisco Ayala a Max Aub en una carta, de las decenas que se cruzaron, que desde ayer se puede consultar en la web de la Fundación del escritor.
La ampliación del epistolario digital de Ayala en la Fundación, hasta alcanzar casi un millar de cartas, permitirá conocer mejor su vida y obra, gracias a una herramienta "muy moderna y única", ha destacado el consejero de Cultura, Miguel Ángel Vázquez. El también presidente del Patronato de la Fundación ha presentado esta mañana en Granada la ampliación de la edición digital del epistolario del escritor, que escribió o recibió estas cartas de 74 corresponsales entre 1924 y 1992.
Entre la nueva correspondencia, hay cartas con ilustres personajes del mundo de la cultura como Pedro Salinas, Juan Ramón Jiménez o Dámaso Alonso, que se unen a otras misivas, previamente digitalizadas, intercambiadas con Jorge Guillén, Victoria Ocampo, Max Aub o Camilo José Cela.
"Se trata de una herramienta muy moderna y única, pues no existe un proyecto de este tipo dedicado a un único autor en el mundo", ha asegurado el titular andaluz de Cultura, para quien esta digitalización, que ya está disponible en la web de la fundación, "permite conocer más en profundidad la vida y la obra de Ayala".
Vázquez ha destacado "el empeño constante de la Fundación Ayala, con Carolyn Richmond al frente", y ha confirmado que, con esta iniciativa, da "un paso importantísimo para seguir avanzando en la obra y la figura de Ayala con un proyecto único que realza al escritor".
Gracias a esta ampliación, el epistolario de Francisco Ayala se enriquece con más de 350 nuevas cartas con 30 nuevos corresponsales, entre los que se encuentran Pedro Salinas, Juan Ramón Jiménez, Dámaso Alonso, Jaime Benítez, Ricardo Gullón o Ángel del Río. Los epistolarios proceden de archivos personales e institucionales ubicados en Argentina, Puerto Rico, Estados Unidos y España.
A las cartas ya publicadas en 2015 en el epistolario de la Fundación con Jorge Guillén y Luis Cernuda, se suma ahora la correspondencia con otros dos miembros de la Generación del 27: Pedro Salinas y Dámaso Alonso. En el caso de Salinas, las primeras misivas versan sobre la posibilidad de una colaboración del poeta madrileño en Realidad, la revista que Ayala y Eduardo Mallea crearon en Buenos Aires en la década de 1940. En la última carta de Ayala a Salinas se hace mención al próximo encuentro de ambos en Nueva York en 1951.
Rafael Alberti y Roma
Con Dámaso Alonso contactó Ayala en 1953, en su condición de director de la editorial Universitaria de la Universidad de Puerto Rico, para invitarlo a elaborar una edición del Romancero. Once años después Ayala escribe desde Roma a Alonso y le comenta su encuentro con otro poeta del 27: "He visto a Rafael Alberti, que está de una gordura impresionante; muy contento, al parecer, de su vida en Roma".
Para dar a conocer las cartas de Francisco Ayala, la fundación optó por desarrollar una edición digital, ordenada por corresponsales, con la transcripción literal de cada carta, una completa ficha descriptiva y, en la mayoría de los casos, la reproducción como imagen del original. Esta edición se publicó en 2015, con la colaboración del Ministerio de Cultura y el Consello da Cultura Galega.
Esa primera entrega, compuesta por más de 600 cartas, incluía cartas intercambiadas por Ayala con Jorge Guillén, Victoria Ocampo, Vicente Llorens, José María Ferrater Mora, Francisco Romero, Guillermo de Torre, Gonzalo Sobejano, Manuel Andújar, Damián Bayón, Camilo José Cela, Max Aub y Corpus Barga, entre otros corresponsales, y abarcaba un arco temporal de casi 50 años, desde 1928 a 1976.
La correspondencia más abundante es la formada por las 166 cartas que se intercambiaron Ayala y el hispanista y crítico literario santanderino Ricardo Gullón; un compendio epistolar que testimonia la amistad entre los dos premios Príncipe de Asturias.
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