El actor asturiano Carlos Álvarez-Novoa, que se hizo famoso por su papel de anciano en la película Solas, de Benito Zambrano, lleva al escenario del teatro Alhambra, desde ayer y hasta el domingo, a las 19:00 horas, la obra La noche de Max Estrella que, inspirada en Luces de Bohemia, de Valle-Inclán, pretende rendir homenaje al dramaturgo en el 75º aniversario de su muerte. Se trata de un montaje del Centro Andaluz de Teatro (CAT) bajo la dirección de Francisco Ortuño. La entrada cuesta 16 euros.

Para Carlos Álvarez-Novoa, el personaje de poeta cieggo que deambula errante por las calles de Madrid es el más complicado que ha hecho hasta ahora, según señaló ayer a su llegada a Granada. "Se hacen miles de Hamlets en España, pero se olvida lo de acá, y tal vez sea Luces de Bohemia, junto con La casa de Bernarda Alba, la obra fundamental de nuestro teatro", había explicado el actor hace unas semanas durante la presentación de la obra en Sevilla.

Álvarez-Novoa señaló que La noche de Max Estrella tiene mucha relación con la situación actual que vive España y el aire valle-inclanesco que respira ahora la sociedad. "El esperpento", asegura, "resultó un método fustigador contra una determinada sociedad en los años veinte del siglo pasado, pero la rebeldía de Valle-Inclán mantiene su vigencia a principios del siglo XXI".

El montaje cuenta con proyecciones de pinturas sobre el escenario y las voces grabadas de otros actores, mientras Álvarez-Novoa recrea al personaje de Valle-Inclán y va rescatando, poco a poco, todo el espíritu rebelde e indagador del autor y poeta gallego, aún vigente,