La exposición El Museo del Prado en la Universidad de Granada, que acoge el Hospital Real desde el pasado 13 de noviembre, prolongará su apertura y permanecerá abierta hasta el 14 de febrero tras haber atraído a más de 6.500 visitantes. La muestra, de visita libre, reúne a las once obras en depósito que la pinacoteca madrileña tiene en la UGR, todas ellas del siglo XVII al XX.

De tres de esas obras se exponen reproducciones, en dos casos porque su gran tamaño impide su traslado y en el tercero porque se encuentra en el gabinete de restauración del Museo del Prado y volverá en unos meses. El Museo del Prado ha llegado a tener hasta 33 obras en depósito en la universidad granadina, el primero de esos préstamos llegó a la universidad en 1881 y el último en 1981.

Se dividen de tal manera que abre la muestra las obras paisajísticas, entre las que destaca Lampecia y Febe, un lienzo de Muñoz Degrain lleno de simbolismo. El Crucificado de Bayeu, cuñado de Goya, se muestra imponente en el recogimiento del rostro y el realismo de detalles como el clavo de los pies o cómo está clavada la estaca en la tierra. Las escenas religiosas también están presentes, como la Vida de un santo, posiblemente San Juan de Mata recibido por Inocencio III.

Al hilo de la recuperación del trabajo de las mujeres artistas, la muestra destaca dos obras: Paso de una procesión por el claustro de San Juan de los Reyes de Toledo, de Elena Brockmann y Casa de vecindad, de Adela Ginés y Ortiz, una "alegoría" de las relaciones humanas a partir de un corral de palomas. 

La exposición se completa con algunos escritos que reflejan cómo llegaron las obras, algunas del patrimonio de la universidad que son copias de obras del Prado de los siglos XIX y XX, así como una escultura de Carlos V de época similar. También se muestran algunas de las publicaciones resultado de la investigación de la UGR en este ámbito durante los últimos años.