La Universidad de Granada en el ámbito de su autonomía y aprovechando su capacidad de innovación, sus fortalezas y oportunidades, con el fin de impulsar el desarrollo de los estudios de posgrado, consciente de que representan un elemento diferenciador clave con el que afrontar el desafío de la competencia por la excelencia, cuyo éxito se sustenta en el rigor y en la calidad, aprobó… la Normativa para la elaboración y aprobación de los planes de estudio conducentes a la obtención del Título de Máster Oficial por esta Universidad…".

El acápite anterior reproduce las primeras líneas del preámbulo de la Normativa reguladora de los estudios de Máster en la Universidad de Granada aprobada en mayo de 2015 y que venía a reunir y poner orden al conjunto de normas que regulaban los estudios de posgrado desde el año 2009; estudios que empezaron a planificarse en 2007 cuando se aprobaron los primeros Reales Decretos que organizaban los estudios universitarios en grado, máster y doctorado. Incluso podemos retroceder hasta 1999 cuando se inició el proceso de creación del Espacio Europeo de Enseñanza Superior (Declaración de Bolonia).

Con todo ello vengo a indicar que la normativa de los estudios de máster, y de los Trabajos Final de Máster, tienen una larga trayectoria y ha sido muy cuidada en la UGR. Por ello lo de rigor y calidad que se cita en el preámbulo no aparece por casualidad, ni es casual que se cite tanto aquello de "la excelencia universitaria".

No salgo de mi asombro cuando se nos dice que la mismísima CRUE (Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas) va a mediar o actuar en algún modo en el caso del TFM perdido (o aún no encontrado) de una de sus estudiantes, estudiante que ha resultado ser la Presidenta de la Comunidad Autónoma de Madrid. Las consecuencias políticas del TFM las pueden ustedes valorar como quieran y según sus opiniones políticas.

Mi preocupación como profesor es saber si mis alumnos podrán acudir a la CRUE si me presentan alguna reclamación en sus estudios de máster. Creo que la normativa de la UGR está muy bien desarrollada, en el ámbito de su autonomía, aunque también lo creía de la universidad PÚBLICA madrileña afectada por el caso. Una universidad que dice en su lema que hace las cosas de forma nueva, pero en este caso está actuando muy a la vieja usanza. Si yo cursara estudios en ella pediría toda la documentación sellada y por duplicado. Vale.