Cáritas y Cruz Roja se 'reparten' las personas con necesidad para cubrir toda la demanda

Las organizaciones de ayuda social Cáritas y Cruz Roja vienen manteniendo desde hace años un sistema de trabajo coordinado en Baza que les está permitiendo ampliar al máximo las ayudas que prestan a las familias necesitadas de la localidad. Una especie de "protocolo social" en el que también están implicados los servicios sociales municipales y que acaba de renovarse por parte de las tres instituciones.

Desgraciadamente, a estas organizaciones no les falta trabajo en los últimos años y sus previsiones van al alza cada día que pasa. Organizarse entre ellas es imprescindible para que una misma persona no reciba la asistencia de las tres y al mismo tiempo pueda haber familias necesitadas que se queden sin la ayuda social que solicitan. Para evitar este tipo de casos, Cáritas Baza se dedica a las personas y familias de nacionalidad española y Cruz Roja a todas aquellas personas y familias inmigrantes que viven en la localidad. Igualmente, los Servicios Sociales del Ayuntamiento saben también a cuál de ellas deben derivar las personas que no alcanzan a atender en función de su origen. Obviamente, la colaboración es estrecha y cuando alguna de las organizaciones no tiene suficientes medios para ayudar a su colectivo ahí están las otras dos para ocuparse de estos casos.

Los responsables de Cáritas, de Cruz Roja y del área de Bienestar Social del Consistorio se han reunido recientemente para confirmar este protocolo y para aclarar públicamente que van a seguir trabajando así porque piensan que es la mejor forma de llegar a todos los frentes. El presidente de Cáritas, Manuel Torralbo, explica que "hace cinco años, cuando la cosa empezó a complicarse, observamos que las mismas personas pasaban por Asuntos Sociales, por Cruz Roja y por Cáritas, que al trabajar de forma aislada les prestábamos la asistencia que nos pedían sin conocer que los otros también les estaban aportando medios. Se daba la situación que entre todos solo ayudábamos a unos pocos, a los mismos, agotando recursos e impidiendo que otros, muchas veces con una necesidad real y extrema, se quedaran fuera y sin posibilidad de optar a cualquier ayuda, así que decidimos sentarnos, olvidarnos de nuestro nombre y ponernos a trabajar de forma coordinada". Fue entonces cuando decidieron el "reparto" de las personas con necesidades, "lo cual facilitaba mucho la labor de ambas instituciones y nos permitía especializarnos en la atención a estos colectivos. Así, el triángulo Cáritas-Asuntos Sociales-Cruz Roja funciona de forma multidereccional, evitando duplicidades y aumentando el número de personas que encuentran respuesta a sus situaciones", añade Torralbo.