El término municipal de Polopos-La Mamola parece haberle cogido el truco a Costas en aquello de conseguir espigones, para envidia de Motril que lleva pidiéndolo años para Playa Granada. El próximo día 16, la directora General de Sostenibilidad de la Costa y el Mar, Alicia Paz Antolín, asistirá a la inauguración del nuevo paseo marítimo que gracias a la remodelación de espigones gana en diez veces su superficie de playa. Pero pueden no ser el único caso en este municipio de la costa oriental granadina. El anejo de Castillo de Baños, que pertenece a esta misma población, también podría contar con el suyo, pese a que Costas afirmó en una reunión celebrada con el alcalde, Pedro García, en Madrid a principios de semana que no hay dinero, pero se ofecieron otras soluciones.

La directora General de Costas está abierta a construir un nuevo dique, siempre que se respeten las condiciones técnicas y la normativa jurídica, y se sufrague con fondos que no sean de su departamento. El alcalde se comprometió a elaborar el proyecto, luego Costas lo estudiará y buscarán financiación desde la entidad local.

En contra de otros ayuntamientos que mantienen una tensa relación con Costas y, en especial, con Severiano Benavides, el responsable a nivel provincial, el independiente Pedro García habla maravillas de esta institución. El primer edil cree que la clave para conseguir unos diques que han transformado a su pequeña calita en una playa espectacular está en la insistencia y la voluntad de entendimiento. "Me ha costado 7 años lograr estos nuevos espigones", explicó. Aunque también reconoció que hubo piedras en el camino. "La principal oposición la tuvimos por parte de grupos ecologistas", detalló. Posteriormente, la Secretaría de Estado de Cambio Climático concluyó en que no se observaban impactos adversos significativos sobre el medio ambiente.

Las obras de este proyecto que ha supuesto una inversión de 2,3 millones de euros, se han llevado a cabo desde diciembre de 2008. Las actuaciones han consistido, básicamente, en la demolición de 4 de los 8 espigones existentes (números 2, 4, 6 y 8), la prolongación de los otros 4 y la construcción de uno nuevo. La empresa adjudicataria, Dragados, S.A., ha realizado prolongaciones que van de los 60 a los 120 metros. La cantidad de escollera que se retiró fue de 9.000 toneladas que se han reinvertido en la obra. Las otras 60.000 toneladas que se han necesitado se han obtenido de canteras que están actualmente en explotación. También se realizó una aportación de arenas en las celdas que se establecen en la nueva situación. El volumen total de arenas necesario para la regeneración de la playa ha sido de 180.000 metros cúbicos. La reordenación del paseo además ha incluido delimitar la línea de ribera mediante la ejecución de un muro de mampostería en las zonas que carecían del mismo, en total, unos 170 metros. Aparte, se han realizado mejoras en la playa, como la colocación de 8 nuevas escaleras con acceso para personas con discapacidad, duchas, una fuente, se han ejecutado dos accesos para servicios de mantenimiento y embarcaciones y se han demolido edificaciones e instalaciones preexistentes. Las zonas de juegos infantiles se ubicaron en otro emplazamiento.