Primero fue la audiencia andaluza quien aplaudió su trabajo y ahora es la Academia de Televisión, o lo que es lo mismo, los profesionales de la tele, quien vuelve a dar una palmada en la espalda por el trabajo bien hecho a 75 minutos, el programa de reportajes que ofrece cada martes Canal Sur televisión. Como directora y reportera del espacio, Toñi Moreno está que no cabe en sí de gozo, aunque asegura que los premios sólo sirven para el orgullo de los padres y que una cadena no te contrata por tener galardones sino por saber conectar con la audiencia. Y queda claro que éste es el caso.

-¿Cómo le ha sentado este nuevo premio?

-Estoy encantada. Es un momento estupendo, sobre todo por el equipo, que ha trabajado muy duro estos dos años. Me alegro, fundamentalmente, por ellos.

-Es el segundo galardón de peso que reciben. Primero el de ATEA y ahora el de la Academia. ¿De cuál se enorgullece más?

-No se pueden comparar. Éste es importante porque son los compañeros, los que realmente saben de televisión, los que lo han votado. Pero no es menos importante que te vote la gente de la calle, que son los que de verdad ven el programa. Si tuviera que elegir, no sabría con cuál me quedaría, en serio.

-¿Tiene pensado qué dirá al recoger el premio?

-No sé si lo recogeré yo o el director general de RTVA, Pablo Carrasco, que también nos acompañará. Si me toca hablar a mí, no tengo pensado nada, pero lo que sí sé es que hablaré desde el corazón.

-Los comienzos del programa fueron difíciles en cuanto al respaldo de la audiencia. ¿En algún momento pensó que 75 minutos podría recibir este galardón?

-Los programas no se hacen en función de un reconocimiento. En este negocio lo que sí importan, no te voy a ser falsa, son los números de las audiencias. Es cierto que al principio nos costó trabajo despegar, pero el programa está gustando muchísimo y, desde que emitimos el reportaje sobre la prostitución, nuestros datos de audiencia son muy favorables. En cuanto al premio, soy de las que piensa que estos reconocimientos los que más lo disfrutan son nuestros padres porque, al fin y al cabo, una cadena no te contrata en base a los galardones que hayas logrado.

-En su trayectoria profesional ha hecho casi de todo, hasta presentar un reality. ¿Estaría dispuesta a un nuevo cambio?

-Es cierto que he hecho casi de todo. Creo que todo lo que no vaya en contra de mi moral y que me posibilite aprender, es bueno. Aunque creo que ahora he dado con un formato a mi medida. En 75 minutos soy más yo que nunca. En el resto de programas tenía que ir con tacones e iba constreñida. Aquí me muestro tal y como soy, voy casi sin maquillar y estoy encantada.

-¿Qué nos queda por ver en los próximos 75 minutos?

-¡Muchísimo! El programa es el reflejo de lo que pasa en Andalucía, por eso, tendremos mucho que contar en función de lo que pase en cada momento. El éxito de nuestro programa radica en las historias que contamos, por eso seguiremos empeñados en encontrar buenas historias por toda Andalucía.