Granada se ha vestido de Halloween durante todo el puente. Aunque el sábado ya se podía ver por la calle a los primeros vampiros y a las primeras brujas, no ha sido hasta este 31 de octubre cuando las calles de Granada han tomado un auténtico ambiente lleno de terror.

Esta fiesta empezó por la mañana en la que cientos de niños disfrazados de sus personajes de terror preferidos visitaban distintas zonas de la capital junto a sus familias. El ambiente ya empezaba a tomar ese color característico que recorre gamas anaranjados, que provienen de las recurridas calabazas, hasta el negro, siendo la oscuridad el principal aliado de los señores del mal que vagan por las calles granadinas.

Ya a primera hora de la tarde, y casi entrando la noche tras el cambio horario, los primeros jóvenes y adultos empezaban a salir a la calle mostrando sus tenebrosas vestimentas. Así brujas, licántropos, demonios y asesinos ensangrentados recorren las calles dirección a alguna fiesta o buscando un lugar con ambiente.

Por otro lado algunos estudiantes ya se preparaban para desplazarse hasta el lugar en el que habían organizado la fiesta. “Nosotros hemos decidido irnos a un cortijo en el pueblo del que proviene uno de nuestros amigos” contaba una joven universitaria mientras esperaban a los demás miembros del grupo. “Nos gusta pintarnos y salir en esta época del año. Nos lo pasamos bien y nos gusta, así que si podemos pues lo hacemos”.

Pero no solo los que podían disfrutar de la tarde libre estaban vestidos para la ocasión. Muchos de los comercios que se encontraban abiertos también contaban con personal vestidos de algún personaje de terror.

De esta forma se encontraba en la recién abierta tienda de peluches Wawel. Aquí se podía encontrar a una risueña bruja que había sido herida. Según este personaje fantástico su escoba se había estropeado y una de sus hermanas, en sustitución, y con la finalidad de modernizar su medio de transporte, le había regalado una ‘Rooomba’ (un aspirador autónomo). Al parecer no resultó ser lo que aseguraba y, al montarse, explotó, ya que realmente era una mina antipersonas. Afortunadamente solamente tuvo una pequeña contusión en la nariz, que se solucionó con un vendaje.

Esta simpática bruja, que apenas lleva dos semanas con este comercio abierto, comenta que “durante la mañana sí hemos podido ver bastante movimiento, sobre todo niños que han salido con las familias. Casi todos iban disfrazados. Por la tarde sí es verdad que se anima menos gente, pero seguro que en cuanto llegue la noche Granada se llenará de todo tipo de personajes terroríficos”.

Algunos, todavía trabajando, ya se vestían para la ocasión

Por las zona de Pedro Antonio de Alarcón había multitud de pubs adornados con todo tipo de motivos terroríficos. Así telarañas, sangre e incluso muñecos de zombis y esqueletos decoraban los locales para crear ese ambiente tan característico de Halloween.

Paseando por las distintas calles colindantes se podía ver cómo iban llegando las primeras personas disfrazadas en busca de buen ambiente y diversión. Abigail, relaciones públicas del pub Santa Madre, comentaba que “durante las primeras horas de la tarde apenas había gente con disfraces. La mayoría esperará hasta la noche para vestirse o disfrazarse de algún personaje. Eso sí, algunos ya se han animado y han empezado a llegar disfrazados. Nosotros tenemos decorado el local durante este puente y todos nos disfrazamos para la noche”.

Otra zona por la que la fiesta, el ambiente y los disfraces hacen acto de presencia en cuanto aparece la oscuridad es por los aledaños de la calle Ángel Ganivet. Algunos de los camareros y camareras de los numerosos pubs de la zona iban perfectamente conjuntados. Además algunos comensales iban tematizados, como un grupo de brujas que estaban disfrutando de una copa o un refresco en una de las terrazas.

“Nosotras llevamos todo el día disfrazadas. Hemos estado en la oficina así, como vamos ahora vestidas” comenta una de ellas. “La verdad que nuestro jefe se ha sorprendido un poco” continúa “ya que él no se ha disfrazado, aunque tampoco le avisamos con anterioridad, de ahí que pusiera la cara de sorpresa que tenía” decía mientras todo el grupo de brujas comenzaba a reír.