Una prueba a con trarreloj y alrededor de 30 participantes profesionales serán los protagonistas el próximo 19 de agosto en Sierra Nevada de la III edición de la Carrera de Escaleras de Bomberos. Una de las peculiaridades que presenta es que se realiza al aire libre y es la de mayor altitud de Europa.

Cuenta con dos modalidades. La primera, que será a las diez de la mañana, solo la corren Bomberos, que portarán el equipo completo de intervención, que pesa alrededor de 25 kilos. Sin embargo, la mayor dificultad de la prueba es la respiración, "pues el caudal de aire que proporciona el equipo es limitado", explicó el Director de la Oficina del Vicentenario del Cuerpo de Bomberos, Owen García. El recorrido lineal es de 900 metros, en el que hay 631 escalones y un desnivel de 130 metros.

El recorrido lineal es de 900 metros, en el que hay 631 escalones y un desnivel de 130 metros

Tras finalizar la prueba, competirán los inscritos en la modalidad open. A diferencia de los bomberos, ellos no llevarán el equipo, aunque la distancia es de tres kilómetros. "Es la única carrera de verano que se realiza íntegramente en la zona de Sierra Nevada", comentó García. Se inicia en la Plaza de Andalucía y la meta está ubicada en la urbanización "los copos".

Las plazas para la modalidad de bomberos son limitadas. "No contamos con muchos equipos de respiración autónoma (ERA) para entregárselos a los participantes y esto hace que no podamos aumentar el número de asistentes", aseguró García. Aunque para aquellos asistentes que aporten el ERA propio, será sin limitación.

Uno de los asistentes que ya se ha inscrito es el bombero de Zaragoza David Robles. Es conocido por ser ganador de varias carreras verticales de edificios e incluso cuenta con propio patrocinador: la marca de ascensores Duplex.

El premio para el primer puesto es un trofeo de la mascota de los Bomberos, llamada zapatones. El segundo y tercer puesto obtendrán una placa, aportada por la Diputación.

Aunque se espera una carrera multitudinaria, presenta dos carencias. Una de ellas es "la falta de mujeres participantes en la modalidad bombero", manifestó García, que las animó a que se inscriban. La media de edad de los competidores, que va desde los 35 hasta los 40 años, es otra evidencia de la "escasez de profesionales jóvenes en el sector", fruto de "la crisis y de que no se ofertan plazas", señaló García.