Merenderos de pueblos de Granada: bares clásicos donde comer como un rey de la montaña
Bares y restaurantes muy cerca de la ciudad tradicionales, familiares y sencillos donde toda la atención está puesta en sus fogones
La ruta otoñal de Granada que esconde un castañar centenario "de cuento", cascadas y puentes colgantes
Es casi otoño y el calendario empieza a pedir que los planes de fin de semana se muden a los bosques y montañas de Granada. Rutas, paseos livianos o, simplemente visitar un pueblo con Sierra Nevada al fondo para comer en familia o con amigos, son las citas más deseadas cuando el calor rebaja intensidad y el cuerpo pide disfrutar sin horarios del entorno. En esta ocasión, las recomendaciones caminan hacia lo gastronómico: dónde comer como un rey o reina de la montaña, en plena naturaleza y a pocos minutos de Granada.
Los merenderos clásicos, esos donde el guiso encabeza la carta y las materias primas no suelen tener que recorrer más que los kilómetros entre la finca o huerto y la cocina, guardan la llave de la tradición gastronómica. Estos son solo algunos de los mejores 'merenderos' de pueblos de Granada donde historia y gusto se cocinan en la misma olla.
El Hervidero, Casa Macareno
En la Carretera de Cumbres Verdes, haciendo honor, por un lado, a su espacio natural (la Fuente del Hervidero) y, por otro, a su icónico dueño, Macareno, aparece este merendero restaurante donde hay que ir con hambre. La especialidad, sus migas tradicionales con todo lo que deben llevar: pimientos, chorizo y tocino. En Casa Macareno se debe comer, también, morcilla, chorizo o el lomo al ajillo, entre otros clásicos de su carta.
El lugar también invita a dar un pequeño o gran paseo por los alrededores o, bien, conocer el sendero de la Fuente del Hervidero, uno de los paisajes naturales más conocidos por los amantes del campo en Granada.
La Corrida
En Huétor Vega, uno de los pueblos que son templo de la gastronomía serrana granadina, aparece La Corrida, un local más que tradicional, indemne al tiempo, donde es obligación probar los callos, las croquetas, la asadura y, por supuesto, las migas. Su local sorprende desde que lo atisbas a pie de calle, es una cochera donde antiguamente se llevaban a cabo las subastas de frutas y verduras de los agricultores de la zona.
Un bar tradicional, familiar y sencillo donde toda la atención está puesta en sus fogones. Se encuentra en la calle Maestro D. Pedro Fernández.
Los Pinos
Aún en Huétor Vega, aparece el espacioso Los Pinos, una casa de comidas abierta desde 1973 que va ya por la segunda generación de anfitriones. Un clásico del pueblo donde quien acude, sabe que va a salir saciado hasta, mínimo, la cena de ese día. Sus platos fuertes son los guisos típicos y los arroces, como el arroz de cerdo San Pascual provenzal.
Los Cazadores
Esta vez en Pinos Genil, un pueblo donde la gastronomía marca el ritmo (cuenta con varias cocinas reconocidas en toda la provincia), aparece Los Cazadores, el lugar quizás más emblemático de la localidad por su afamada cocina tradicional. En este lugar a pie de río es imprescindible probar su arroz caldoso así como el conejo y otros platos que saben a serranía granadina.
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