Un bombero declara que De la Blanca le contó que había manipulado un examen

Un bombero interino de Granada, Rafael López, declaró ayer ante el tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia de Granada, encargado de enjuiciar las supuestas irregularidades que presidieron las oposiciones a bombero de 2003, que el acusado José Manuel de la Blanca le llegó a comentar que "había manipulado" el segundo examen de uno de los aspirantes suspensos.

Este mismo bombero fue quien llevó a un notario las preguntas del tercer examen antes de la celebración del ejercicio, a fin de "dejar constancia de que habían sido filtradas". Su valioso testimonio suscitó numerosas preguntas por parte del fiscal y los abogados defensores, así como distintas anotaciones por parte de los magistrados que dictarán sentencia.

López fue de los primeros testigos que comparecieron durante la segunda sesión del segundo juicio que se celebra por las anomalías registradas en aquella convocatoria, tras haber sido anulado el primero por el Tribunal Supremo (TS) para que se admitiese como prueba testifical el testimonio del ex alcalde socialista José Moratalla, quien comparecerá hoy.

López, que fue el único interino que suspendió aquella oposición convocada para cubrir 16 plazas de bombero, explicó que tras la celebración del segundo ejercicio, tuvo "muchas sospechas de que se había filtrado el examen". Añadió en este sentido que pese a que se trataba de un ejercicio "muy difícil", con un nivel muy superior al exigido, hubo algún compañero que "en media hora lo hizo perfecto y lo entregó".

Él no aprobó, motivo por el que mantuvo algunas conversaciones con el que fuera jefe de Bomberos de Granada, Antonio Rodríguez Franco -ya fallecido- y con el acusado José Manuel de la Blanca, quien formaba parte del tribunal opositor por su pertenencia al Cuerpo de Bomberos, al igual que el otro procesado por las irregularidades, Gerardo Martín.

En aquellas conversaciones le aconsejaron que pidiera una revisión de su examen, lo cual hizo, aunque no sirvió para nada, pues no fue aprobado. Fue entonces cuando decidió llevar al notario las preguntas del tercer examen que había conseguido a través de De la Blanca.

López dejó claro que De la Blanca -que es un histórico sindicalista de CCOO- no participó en la filtración del segundo examen, aunque sí tomo parte en la del tercero, pues quería "que todos los interinos aprobáramos, y no unos sí y otros no".

Cabe recordar en este punto que el sindicalista siempre ha sostenido que su participación en las irregularidades de aquellas oposiciones sólo tuvo como objetivo denunciar que habían sido fraudulentas, tras detectar que se había filtrado el segundo ejercicio a sólo unos pocos aspirantes.

Otro de los testimonios importantes que ayer se escucharon en la sala de vistas de la Sección Segunda, por la que desfiló una quincena de testigos, fue el del secretario del tribunal opositor, Abraham Galán, encargado de custodiar los exámenes y de garantizar el anonimato de los aspirantes. En su intervención, aseguró que no observó ninguna irregularidad en la corrección de los ejercicios. "Si alguien hubiera dicho que había alguna irregularidad o filtración rápidamente hubiéramos actuado", recalcó.

De la Blanca, que en el anterior juicio -invalidado- fue condenado a 5 años de cárcel por delitos de revelación de secreto y falsedad, no acudió ayer a la Audiencia tras haber obtenido permiso del tribunal para ausentarse de las sesiones por su delicado estado de salud. Sí acudió, lógicamente, su compañero de banquillo, el bombero Gerardo Martín, que negó el lunes haber filtrado pregunta alguna en aquella oposición, tal y como hiciera en la vista anulada por el TS.

La sesión de hoy, la tercera, se presume larga, pues están previstas 17 intervenciones de testigos y peritos, entre ellas, la del ex primer edil José Moratalla, quien deberá de corroborar o no que De la Blanca se reunió con él ciertamente para poner en su conocimiento el fraude.