El ex alcalde de Arcos, José Luis Núñez (PP), defendió ayer su gestión al cargar su defensa penal y la de otros cuatro concejales populares a las arcas municipales por el caso de un presunto enchufismo en el Ayuntamiento serrano que se investiga en el Juzgado. Núñez argumenta que su actuación está avalada por un informe de los servicios jurídicos municipales, que le dio carta libre para ello. Así el Ayuntamiento pagó en junio de 2015 a un bufete de abogados 12.800 euros de las arcas, en concreto dos días antes de que se produjera el relevo en la Alcaldía arcense, a favor del actual alcalde, Isidoro Gambín (PSOE).

Este documento jurídico está enfrentado al informe que emitió la Intervención municipal, que rechazó avalar el pago de abogados, recordando que la institución municipal tenía que dar "prioridad" al abono de las nóminas de los trabajadores municipales, que no habían cobrado aún la paga de mayo de ese año.

Los ediles del PP contrataron los servicios jurídicos para responder como investigados ante las presuntas irregularidades en la contratación de unos 25 familiares y personas afines en el Ayuntamiento. Núñez dijo que en calidad de alcalde "no puede estar uno defendiéndose de todas las acusaciones con el dinero propio ni costear la defensa de las acusaciones y los caprichos de algunos".