La Junta de Andalucía ha autorizado al Área de Cultura y Patrimonio del Ayuntamiento de Almuñécar un proyecto de intervención arqueológica para el estudio de grafitos históricos que se extienden por los muros de encauzamiento de los ríos Verde y Seco de la localidad sexitana y que datan desde el siglo XIX hasta mediados del siglo XX.

"Estamos ante una muestra más de la importancia del patrimonio arqueológico de Almuñécar, que abarca todas las épocas históricas. Por ello vamos a realizar un inventario de todos los grafitos históricos, ya que ofrecen valiosa información sobre el momento en el que se están construyendo los muros de contención de los citados ríos para proteger las plantaciones, antes de caña de azúcar y después de subtropicales, de las riadas, y que, históricamente, han tenido un papel relevante en la economía de nuestro municipio", ha manifestado el concejal de Cultura, Alberto García Gilabert, quien ha agradecido el trabajo de la arqueóloga municipal, Elena Navas.

Según recoge el proyecto de intervención arqueológica preventiva, que ha recibido luz verde de la Junta, "la iniciativa surge gracias a la colaboración de vecinos de Almuñécar quienes alertaron de la existencia de grafitos en las citadas márgenes de ambos ríos que recorren el municipio sexitano. Los grafitos tienen cronologías que abarcan desde el siglo XIX hasta mediados del siglo XX, correspondientes a las diferentes etapas de arreglos de los muros de encauzamiento de los ríos, tras ser destruidos en diferentes episodios de riadas a lo largo de este tiempo".

"Los grafitos representan escenas, barcos y animales marinos, así como un extenso repertorio de nombres y fechas. El valor de la memoria histórica y su conservación, en un contexto de florecimiento de la económica de la Costa Tropical por la producción azucarera y de frutos tropicales lo que motiva el estudio de los mismos y de los muros sobre los que se crearon, que muestran la preocupación y el interés por encauzar el agua, captar sedimentos fértiles y distribuir el riego por la diferentes plantaciones de las vegas de ambos ríos", indica.

Según recoge en el documento la arqueóloga municipal, "las estructuras emergentes son muros de contención, que contienen elementos arquitectónicos muy interesantes como son las tasquibas; su estudio nos ofrecerá información sobre los cambios sociales, económicos y medioambientales, producidos en el municipio de Almuñécar a lo largo de la historia, a la vez que se protegerá el patrimonio cultural relacionado con el agua como recurso natural de enorme interés en esta zona de la Costa granadina".

Uno de los grafitos hallados en Almuñécar

En cuanto a la intervención arqueológica a llevar a cabo "va consistir en la realización de un análisis arqueológico de la citadas estructuras emergentes, ya que en este caso, responde a una necesidad de estudio para la conservación y difusión del patrimonio y no a la realización de obras, por lo que no hay afección al subsuelo", dice la arqueóloga en su informe.

Por su parte el concejal de Cultura y Patrimonio, Alberto García Gilabert, ha destacado los objetivos y labores a llevar a cabo en los muros de contención de los ríos Verde y Seco. "La actuación arrancará con la localización espacial y ubicación en planimetría de los grafitos, la realización de un inventario, documentación gráfica y fotográfica de los grafitos históricos, así como de los elementos estructurales significativos. A ello se sumará la identificación de unidades estratigráficas murarias y la realización de una descripción de las técnicas constructivas utilizadas, señalando las fábricas, materiales de construcción utilizados, aparejos, entre otros". 

"Por otro lado, se procederá a la descripción cultural de las estructuras, a la evolución histórica y establecer cronologías, ampliar el conocimiento de las fases constructivas más antiguas, así como a la obtención de una lectura estratigráfica de los parámetros en los tramos emergentes. Con el fin de alcanzar estos objetivos se ha planteado la intervención arqueológica preventiva mediante análisis de las citadas estructuras emergentes", señala García Gilabert.

Por último, el edil sexitano de Cultura y Patrimonio destaca que todo este proyecto requiere de un programa de actuación que consta de tres fases. "La primera será un trabajo de campo con la exploración visual completa y la identificación de elementos constructivos singulares y los grafitos históricos. La segunda fase, se centrará en el trabajo de laboratorio con el fin de procesar los datos recabados y elaborar los resultados, y, la tercera fase la realización de un catálogo e itinerario para difusión pública así como la publicación científica y divulgativa".