La autovía del Mediterráneo A-7 entre los enlaces de Carchuna-Calahonda (Motril) y de Castell de Ferro, en la costa de Granada, cerradas tras un deslizamiento en el talud de la margen derecha (sentido Almería) serán reabiertas completamente mañana, viernes 26 de noviembre, según informa el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma).

Debido a la magnitud del deslizamiento, en el punto kilométrico 354+300, las dos calzadas de la autovía fueron sepultadas bajo la tierra, especialmente la calzada en sentido a Almería. El talud quedó en una situación muy inestable, presentando "importantes fracturas", lo que provocó que existiese "una alta probabilidad de que se produjesen nuevos desprendimientos" sobre la A-7.

Los trabajos para recuperar la vialidad de la autovía comenzaron inmediatamente y desde entonces se ha trabajado de forma prácticamente ininterrumpida en la zona con objeto de asegurar la estabilidad del talud y así "evitar que se produzcan nuevos desprendimientos sobre la autovía".

En paralelo, en la calzada izquierda (sentido Málaga), justo en el mismo punto kilométrico de la autovía A-7, se ha estado completando los trabajos de estabilización del talud existente, el cual sufrió importantes deslizamientos en abril de 2020.