La Policía Nacional ha detenido en Motril a dos jóvenes patronos de embarcación que introdujeron en la costa a 61 inmigrantes, entre ellos 18 mujeres, tres menores de edad y cinco bebés, que pagaron entre 2.000 y 3.000 euros por el viaje en patera.

Los arrestados, dos jóvenes de 21 y 24 años de Gambia y Costa de Marfil, se habían camuflado entre los inmigrantes que viajaban a bordo de la patera, que partió desde Marruecos y fue rescatada por Salvamento Marítimo.

Los inmigrantes, mayoritariamente de origen subsahariano, desembarcaron en el Puerto de Motril, según la Policía, que atribuye a los detenidos la presunta autoría del tráfico ilegal e inmigración clandestina de personas.

Fue la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Granada en colaboración con la de Falsedades Documentales de la comisaría general de Extranjería y Fronteras de Madrid y el servicio Frontex, quien identificó a los dos patronos camuflados entre los inmigrantes.

Resultaron fundamentales para su detención los datos recabados de ONG especializadas, así como en el proceso de identificación, reseña dactilar y fotográfica y registro de pertenencias.

Dos agentes trasladan a comisaría a uno de los dos patronos detenidos

Los agentes lograron identificar a la persona que pilotó la embarcación y a la que empleó la brújula y las comunicaciones hasta la llegada de Salvamento Marítimo, momento en que se deshicieron de los efectos o instrumentos que podían delatarlos y se hicieron pasar por otros ocupantes más de las dos pateras.

El objetivo de la persona que realizaba de enlace con la organización era llegar hasta aguas españolas, según la Policía, que dice que al quedarse sin cobertura tenía indicaciones de alertar a los servicios de rescate españoles.

Cada uno de los inmigrantes introducidos en España habría pagado entre 2.000 y 3.000 euros por el viaje en función de su origen.

Algunos de los inmigrantes relataron que la organización dedicada al tráfico ilegal de personas de la que los dos patronos formaban parte los sometió a vejaciones, amenazas y coacciones y no les proporcionaron víveres durante el viaje.

Además, durante el trayecto en patera, los ahora detenidos, que han sido puestos a disposición judicial, los amenazaron con matarles si les delataban antes las autoridades una vez fueran rescatados.