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La Copa del Rey, de nuevo una quimera

  • Una vez desvanecido el sueño de estar en Bilbao, el CB Granada está obligado a ganar al Murcia para no meterse en problemas

Como las muñecas de Famosa, durante las últimas temporadas la ilusión por ver al Club Baloncesto Granada en la Copa del Rey volvió a casa por Navidad. Pero, como en los últimos años, esta ilusión se quedó en eso, en una mera ilusión que igual que llegó, se fue. Este año no iba a ser menos. La verdad es que el conjunto que entrena Trifón Poch tenía escasas opciones de ir a la ventanilla para sacar el billete con destino a Bilbao, posibilidades que se quedaron en nada tras la estrepitosa derrota sufrida el domingo en la pista del Unicaja. Una vez más, el gozo se queda en lo hondo del pozo y la afición, sin una alegría que llevarse a la boca. Al menos, en esta ocasión no habrá que esperar a la última jornada de la primera vuelta de la competición para hacer visible la desilusión.

l HACIA ABAJO

Y como no hay término medio, la realidad que se ve nada más echar un vistazo a la tabla de clasificación es que hay que tener mucho cuidado con la frontera que separa la permanencia del descenso. De momento, se mantiene la distancia con el último, el CB Murcia -próximo rival del cuadro granadino-, pero no hace falta recordar que bajan a la LEB el colista y su antecesor, y ese segundo puesto de la condenación no está tan lejos. De momento lo ostenta el Bilbao Basket, un conjunto llamado a cotas más altas y que seguramente reaccionará (de momento se ha hecho con los servicios de Axel Hervelle para reforzar una plantilla ya de por sí fuerte). Por encima, una hornada de equipos entre los que está el CB Granada. Ninguno de éstos, que son los que tras dieciséis jornadas llevan seis victorias, puede despistarse lo más mínimo porque, a buen seguro, entre ellos está la papeleta que da el paso a la segunda división del baloncesto nacional.

l CB MURCIA

Y como toca mirar hacia abajo, el próximo encuentro de las huestes de Trifón Poch se las trae, más que nada porque no se puede fallar. El partido ante el CB Murcia es de esos que se puede catalogar de vital importancia. Si se gana se habrá dado un paso más hacia una permanencia que, tal como está el panorama, puede estar en torno a las trece victorias. Si, por el contrario, se pierde, no sólo se le habrá dado vidilla a un rival directo en la lucha por eludir el descenso, sino que, además, la situación en la que quede el equipo sería un poco complicada. Es cierto que queda toda una segunda vuelta por disputarse, pero cuanta más ventaja se coja en al término de la primera, mejor. Como dice el refrán, será mejor no dejar para mañana lo que se pueda hacer hoy.

l MÁLAGA

Sobre lo ocurrido en la capital de la Costa del Sol el pasado domingo, será mejor pasar página, pero no sin antes haber sacado conclusiones. El técnico, que de esto sabe un rato (no como los que escriben de esto, que no tienen ni pajorera idea..., según dice alguno por ahí), seguro que habrá tomado nota. Desde luego, lo que no se puede volver a repetir es la pésima defensa que se hizo ante el Unicaja.

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